Comentario: Nuevo restaurante en Barrio de Las Letras. Parece que los socios de este Grupo saben lo que se hacen. Cuando Triciclo irrumpió en el mercado, se convirtió en un referente. Y desde entonces, han sabido concretar personalidades diferenciadoras a cada uno de los restaurantes y tabernas que han montado (5 con éste). En todos hay argumentos con capacidad de transmitir un modelo, una cocina y una personalidad. Incluso para clientes diferentes en algún caso. Lo primero que se percibe en la larga carta de este local, es rupturismo. ¡No es clónica! No transita por los manidos caminos habituales, por los mismos platos, lo cual ya es toda una declaración. La otra, que la carta se estructura de forma diferente y hay varios platos de la carta para comer “a mano”. En lo decorativo permanece también en el mismo concepto de todos los locales: informalidad. Es decir: urbanita, sencillo, desprovisto de accesorios, informal, mesas altas y bajas, barra con taburetes de hierro y diseño neoindustrial vintage. Las sillas de hierro de las mesas bajas son incómodas. Detrás de todo esto están Javier Goya y Fran Ramírez. Este último, ha abandonado uno de los importantes restaurantes de Madrid, para participar en este proyecto. Cocina ininterrumpida y medias raciones en una carta que se presta al disfrute de la variedad de platos. Muy buena carta de vinos de Fran Ramírez, con una selección muy completa y llena de interés, con más de un centenar de etiquetas. La selección de vinos por copas es excelente. Calidez, informalidad, deseo de agradar. Llevan pocas semana abiertos, por lo que tienen detalles por pulir en ritmo de la cocina, la entrega de platos se resiente.

Especialidades: Cocina abierta, creativa, rupturista, global, urbanita, pero también tradicional con ejecuciones contemporáneas, que se hacen deseables en la primera lectura. Nos gustó la cremosidad vegetal de la croqueta de espinacas, tomate seco y queso. También la de los huevos rotos con jamón ibérico: una patata asada con piel y vaciada, con huevo y jamón. La racial melosidad del mollete de pringá, papada ibérica y salmorejo, pide una toma diaria. Y la suculencia del tortode portobello, cebolla, huevo y papada, una cada 8 horas. Arriesgadas endivias a la brasa con crema de la peral, sardina ahumada y hierbas anisadas. Ricas y llenas de contrastes, no gustará a todos. Berenjena asada, con yogur, granada y pan libanés, la presentan y finalizan en la mesa; es una buena unión de ingredientes que funciona bien en el paladar. La entraña de vaca a la brasa, correcta y perfecta de punto de asado. Los postres no están a la altura del resto, excepto el arroz con leche. Fino el mousse de chocolate, pero todavía “no se lleva bien” con el acompañamiento. Y el yogur griego con frutas y verduras es poco interesante. Nuevo restaurante en Barrio de Las Letras.

Comentario: Restaurante en Aranjuez. Julián (Juli para los amigos) y Marimar tras 25 años juntos, con trabajo, pasión y deseo de llegar, han conseguido su sueño. Tener un restaurante reconocido en un bonito y buen local. Y todo esto, desde que tenían el Kiosko Juli, y en Aranjuez, con uno de los mejores niveles gastronómicos de la provincia. Es el más concurrido a diario. En su barra toman vinos los lugareños y hacen comidas informales los que allí trabajan o están de paso. Tapas y raciones que programan en la pizarra según mercado y temporada. El restaurante queda para los mismos clientes, pero sentados, en un local moderno, luminoso y con una decoración contemporánea. El local perteneció a la casa de Alba y en un salón tiene unas aguatintas de Goya (de ahí el nombre). Aquí vivía cuando iba a visitar a la corte. Además, un atractivo y resguardado patio interior, muy solicitado en buen tiempo. Otro comedor junto al patio y el salón de las aguatintas que en un futuro podrá ser un lugar de eventos.

Especialidades: Los clientes, muy fieles desde su Kiosko, comen lo que Juli les ofrece y Marimar les hace. La razón de la fidelidad, la buena relación calidad / precio. La cocina honesta, sencilla y autodidacta de Marimar, y su punto supremo. Siempre suelen tener marisco de diferente naturaleza, en nuestro caso comimos unos estupendos mejillones escabechados en la casa, seguido por unos ricos camarones pasados por la sartén y las buenas navajas de buceo, ambos clavados de punto. Delicados los guisantes de lágrima de Llavaneres con jamón y huevo escalfado. Correcta la trilogía de atún rojo en tartar, tataki y sashimi de ventresca. Sedoso y auténtico el pilpil de cocochas de merluza, almejas y espárragos verdes. Y las chuletillas de cabrito lechal para finalizar: tiernas tiernas, ricaaas. Las alcachofas confitadas parece que es otro de los platos deseados por los clientes, como los caracoles con níscalos y los callos. De postre, la conocida y golosona “mejor tarta de chocolate del mundo” de una franquicia portuguesa que triunfa en el mundo; y una torrija que tendrán que mejorar para añadirle cremosidad y refinamiento a un nuevo soporte. Bodega interesante con especial interés por los vinos de la provincia. Restaurante en Aranjuez.

Comentario: Nuevos restaurantes en Madrid. Dos profesionales que durante 20 años hicieron de Aldaba, un referente de sencillez, de cocina clásica actualizada. De cocina de mercado, de producto y temporada, con un gran servicio de escuela clásica. La historia fue más o menos así: tras 20 años de éxito, la nueva dirección decidió sustituir a la cocinera por otro buen profesional. Para los clientes que iban a comer su cocina, fue muy difícil de entender y dejaron de ir. José Luis Pereira, director de sala y socio abandonó el restaurante y se fue al vecino (también desaparecido). Local realmente importante, donde estaba el antiguo Ponteareas. Magnífico clima y ambiente: estilo propio,  diferenciación, clase. Barra y sala de estar con sofás a la entrada. Comedor muy luminoso con grandes ventanales que dan a un jardín interior.

Especialidades: Hoy en Alcotán, abierto a primeros de julio, todavía “en rodaje” y sin carta finalizada, comimos un gran producto con ejecuciones impecables. Agradables croquetas cremosas de rebozado fino y dorado. Judías verdes con compota de tomate con estupendos langostinos. Espectacular y fresquísimo mero a la plancha. Ajoarriero como solo sabe hacerlo una navarrica, con el bacalao desmenuzado para integrarlo en la cremosidad de una salsa deliciosa, en realidad un pilpil. De postre, canutillos únicos aprendidos de la cocinera navarra que los inventó. Nuevos restaurantes en Madrid.

Comentario: Novedades restaurantes Bernabéu. Es el proyecto de Nagore Irazuegi y su pareja el cocinero Rodrigo García, tras 7 años de Arima. Una propuesta vasca, transmitida desde la autenticidad cultural del caserío, que resume como nadie las cualidades ancestrales de esta tierra gastro. Por tanto, en lo decorativo, la amable rusticidad de materiales nobles: pizarra, madera, yerro, zalea en bancos, flor de cardo (símbolo de protección), txalaparta. Todo ello en un local amplio, neto y sobrio, pero cálido, con la elegante autenticidad y sencillez del caserío. Del caserío me fío, decía un antiguo eslogan de campaña publicitaria. Casa de comidas contemporánea, informal. Dos comedores con mesas distantes, uno de ellos frente a una cocina que marcha como un reloj, condimentada por el buen rollo entre cocineros. Servicio cercano en la distancia, atento y amable.

Especialidades: A Rodrigo García, autodidacta y ex - Chuka Ramen, se le nota en algunos platos y aderezos, sus chispazos creativos y de fusión de su pasado en la restauración y su vida, lo que implica, que no todo es vasco. Él siempre al cuidado de la parrilla volcánica, que es lo peliagudo. Excelentes productos de proveedores reconocidos. Los ejemplares para asar salen en bandeja de la cocina, para mostrarlos para su aprobación, con peso y precio a los comensales. No hay menú degustación, lo que se agradece. Nagore que dirige la sala, se encarga de hacerlo con los clientes a base de medias raciones. Espectacular gilda con pan suflado, mayonesa de piparra, crema de aceitunas y perlas de aceite. Rico buñuelo de morcilla de Beasain, con mole de alubias de Tolosa, chocolate y espelette. Pastel de merluza en homenaje al Astelena (bar restaurante de Sanse, del que nace el pastel de cabracho de Juanmari Arzak). La mayonesa de su colágeno completa un bocado muy rico. Chipirón a la parrilla, salsa de su propia tinta con jugo de manitas de cerdo y chalotas: untuoso, potente, sedoso… la esencia del mar. Delicadas, sutiles y ricas kokotxas a la parrilla, con su pilpil, ajo, espelette y perejil; quizás dominaba el volumen de aderezo. Almejas con arroz envejecido: cremoso, marino, elegante y perejilero, como manda la tradición. Cuello de cordero de oveja (la vasca latxa se supone), con praliné de ajos, queso viejo feta rallado y salsa demi-glacé. Sorprende el corte entero de la carne, la melosidad de su textura, el sabor y la intensidad cremosa de la salsa. De postre, para los golosos, rico tocinillo cítrico con chantilly de palo cortado. Crema de manzana asada con helado de manzana. Buena bodega con más de 250 etiquetas de las destacadas procedencias nacionales e internacionales de rigor. Buen listado de champagnes. Novedades restaurantes Bernabéu.

Comentario: Nuevo restaurante de moda en Madrid. El Grupo Big Mamma, ha dado en el clavo en Madrid. Pero lo viene haciendo desde que abrieron: París, Lille, Lyon, Londres. Ya son 13 locales en pocos años. Todos diferentes. Dado el éxito, no tardarán en inaugurar otro en Madrid. Éste lo abrieron en verano de 2020, en el Barrio de Salamanca, donde estuvo Loft 39: 900 m, terraza de 235 m y a pesar de la Covid, 300 sillas, más de 600 servicios diarios atendidos por 100 italianos muy jóvenes que transmiten alegría de vivir. Italiano, contemporáneo, joven, divertido, rupturista y transgresor en lo decorativo. Nunca nadie se ha echado a los ojos un restaurante así: un palazzo “loco”, cálido, kitsch con lámparas de cristal, terciopelos y mil rincones diferentes. Una sala totalmente amarilla con la cocina al fondo, otra salmón con capitonés, otra roja. En la terraza no cabe más vegetación ni bombillas, ni telas de colores llamativos. Bajo sus pérgolas la noche es romántica. En fin, todo ello inspira diversión y buen rollo. La barra quizás es lo más divertido, con un DJ, 30000 vinilos en las paredes y altavoces por todos los lados. Preparan cócteles que por su nombre y elaboración divierten. El cóctel Front Row, de los más servidos, marca el vacile de la casa, viene dentro de una matrioska. El Big Mamma con vodka, ginger ale y lima también está bien.

Especialidades: Carta de trattoria populare, larga, con producto auténtico y precios amables. Los antipasti son atractivos, por los buenos productos italianos en juego. Singular pero correcto vitello tonnatto con atún, mayonesa, alcaparras y anchoas. La dolce burrata es muy agradable, con higos confitados y frescos. “No puerro más”: puerro asado al horno Josper con queso straciattella y salsa de alcaparras, es recomendable. Las “CroqueStar” de jamón y trufa rallada, no están mal. La pizzas son napolitanas, con su grueso reborde: la Margherita tradicional muy buena y auténtica, y la suflle truffle, con ricota, tarufata, setas y trufa fresca, sabrosa y diferente. De las pastas, que elaboran a diario en la casa, la gran carbonara es otro de los platos de éxito: con guancialle, yema de huevo y pasado por una rueda de queso pecorino Borgo Antico para su mantecatura. El espectáculo de su finalización en la mesa encanta, pero el exceso de queso tapa la yema de huevo y su sabor. Hay que dejar un hueco para los postres. La tarta Te queso mucho, es cremosa y la de limón con su merengón inmenso, golosona. Si le gustan los helados, el de pistacho de la casa, es de los buenos. Nuevo restaurante de moda en Madrid.

Comentario: Los 5 mejores restaurantes indios Madrid. Atul Kochhar ya no está en Benarés, ni siquiera en Londres, restaurante que fundó hace años. En Madrid él también lo inauguró en 2015. Hoy sigue su camino con una cocina india, de recetario tradicional adaptado al paladar español: menos picantes, menos aromas especiados intensos. El responsable de cocina es el español Diego García Fernández, ex-Coque, La Biblioteca Santo Mauro; y en Londres: Santini, Zuma y Barrafina. Hoy el proyecto también respira una contemporaneidad más accesible: mayor informalidad, tanto en la propia sala, aligerada y desprovista de manteles, como en las diferentes propuestas de menús y carta. Alternativas económicas diferentes, al alcance de más bolsillos. En la capital abundan los restaurantes indios muy económicos, de cocina correcta y sabrosa, pero con producto y establecimiento acorde con sus precios populares... y alejados de este nivel de establecimiento, claro. Ocupa el mismo local que en su día tuvo otro indio reconocido, Anapurna. La cristalera escaparate de la calle se desliza y en buen tiempo, da paso una agradable barra - terraza remetida. Ideal para tomar un aperitivo acompañado de ricos bocados exóticos. Interior luminoso y atractivo, con un punto exótico y una atmósfera relajante, por la gran pared cristalera y su patio interior, tranquilo y apacible. En las noches de verano, el patio desprende paz y sosiego y se crea un gran clima en su media docena de mesas. Agua en el cetro del patio, verde al rededor e imágenes de la ciudad santa de Benarés proyectadas en la pared.

Especialidades: Buenos cócteles como el Jaipur con fruta de la pasión, vodka y limón; o el margarita de azafrán. Y para picar en la barra: samosa de patata; los naan de chipirones, murg Kathi roll (rollito relleno de pollo tandoor). En la cocina se aprecian actualizaciones de grandes clásicos, de una cocina tan inmensa y variada, como poco dominable para el español medio. Cocina de sabor, con puntos de picante españoles en la mayoría de los casos. Rico el curry de pollo, chiken tikka masala. con tomate, cebolla y fenugreco. Magníficos los kebabs de cordero al horno tandoor. Buen guisote el rogan josh, o curry de cordero al estilo Cachemira. Las lentejas negras (black dal) que se sirven de acompañamiento, no se la pierda. Ricas también las dal tarka, amarillas, y los garbanzos, (channa masala). Tendrá que comer un arroz, producto que bordan: el arroz pulao, con aroma de comino y azafrán puede ser uno de ellos. Acompaña los platos de maravilla. Si no comiese el menú degustación, apúntese a las carnes, mejor que a los mariscos y pescados. Al margen de esto, el cangrejo de cáscara blanda (crispy kekada) con salsa de maracuyá y chile verde, es correcto; como la vieira (jalpari scallops) a la sartén con crema de apionabo y crujiente de quinoa. El jarrete de cordero (bhuna gosht biryani), con arroz especiado con menta, es otra buena elección y uno de los platos clásicos de la casa. Postres correctos, como el (bhapa doi) yogur aromatizado al agua de rosa y frambuesa; y milhojas de coco, huevo y nuez moscada. Deliciosos los panes hechos al momento en su horno tandoor. Correcta bodega. Los 5 mejores restaurantes indios Madrid.

Comentario: 5 mejores arroces Madrid. El arroz es el hilo (grano) conductor de vidas, familias y momentos para compartir de valencianos y levantinos en general. Alrededor del grano toda una cultura gastro: todo lo que se cuece en una paella o va a su alrededor, emerge del agua salada o dulce de la albufera. José Luis García Berlanga, hijo del mítico director de cine, representa esa pasión de los valencianos, autodidactas casi todos y apasionados por bordar el arroz. Si un no profesional, ya con cierta edad, pone una arrocería, es que está muy seguro de su capacidad. Los cocineros profesionales saben mejor que nadie, que ser arrocero no es nada fácil. Quizás fue la llama que encendió la idea de este proyecto, que nació en plena pandemia a finales del 2019. Atractivo y luminoso restaurante frente al Retiro: amplias cristaleras, el calor de hogar una librería, tonos blancos y claros y mesas vestidas con amplitud de espacio entre ellas. Tienen una pequeña terraza en la acera, para cuando el tiempo es amable.

Especialidades: Vamos al grano: aquí se viene a comer arroz y algunas raciones o platos para compartir, mientras llega la gramínea. Utilizan la variedad albufera de productores locales de La Albufera, una de las que mejor transmite el sabor, aunque es una de las más frágiles. Diferentes sofritos y caldos que transmiten su personalidad y valores suaves. Elaboran sobre todo arroces en paella, secos y de capa fina los más ricos y deseados: sueltos, nada grasientos y de sabores no muy intensos, pero que buscan el equilibrio con la personalidad del resto de ingredientes. El más solicitado, el senyoret. Los fundamentales, el abanda y la paella valenciana tradicional con su pollo, conejo y garrofó. Hasta una decena diferentes, entre ellos: el de bogavante, el negro o el de carabineros. Casi todos exigen solicitarlos “por encargo”, al concretar la reserva. Para compartir por delante: la coca mallorquina, alcachofas confitadas en su época, esgarraet clásico, con berenjena asada, pimientos y cebolla. Pamboli de sobrasada mallorquina, boquerones fritos y las clásicas clóchinas. Estos son los argumentos para llegar airosos al arroz. De postre, torrija briochelle y tarta fina de manzana, más que correctas. 5 mejores arroces Madrid.

Comentario: restaurantes con menús degustación Madrid. Marca conceptual que muestra la ideología y el camino del negocio. Parece un palo pero es un bicho. Parece un bareto de barrio, pero es un restaurante de menú diario. Parece y lo es, pero de menú degustación fijo, con solo 6 pases 6 y un sobrero dulce de postre. Cocina de autor, mediterránea de fundamento y espíritu viajero, iconoclasta y arriesgada en la búsqueda de la diferencia. No hay reglas, si no es diferente no vale y si se repite tampoco. Es sencilla, dadas las limitaciones de su cocinita de la señorita pepis, con “barra japo” frente a ella… y es que si eres pequeño en tamaño, tienes que ser grande en ideas para cocinar uniones de ingredientes disruptivas, revisiones de platos sorprendentes y salsas potentes. Lo que mañana se coma en el menú de degustación fijo, puede que no se cene, incluso puede que algunas mesas no coman los mismos platos. Todo cambia, nada es igual en cada servicio. Trabajan platos tradicionales españoles o de influencia asiática o latina. Productos de calidad y presentaciones que en algunos casos buscan parecer lo que no son, como su marca indica.

Especialidades: Y el responsable de todo esto es Daniel Pozuelo, cocinero y dueño que trabajó con algunos de los mejores: Arzak, Alboroque, Dstage, Kena, Casino de Madrid. Posee una gran técnica, fruto de este pasado con grandes cocineros. Su hermano Guillermo dirige la sala, aunque todos presenta platos. Entre los platos comidos en diferentes ocasiones: una ostra que aderezan de diferentes maneras: con caviar; con ponzu casero de melón, con zumo de mandarina y flor eléctrica; un gazpacho de fresas oxidadas; dumplings rellenos de jabalí con caldo agripicante; una merluza con encurtidos; su versión de los huevos rotos: huevo a baja temperatura con crema de champiñones y tierra de shitake. Leche con galletas de postre, con helado de leche de cabra y crema de galletas. Muy buena relación calidad precio, menú degustación atractivo y divertido con un gran precio. La clave es la sorpresa, vaya con ese ánimo. En los vinos tampoco tienen una carta fija, suelen recomendar unos vinos dependiendo de los gustos o el camino de cada cual suelen tener por un par de docenas de etiquetas. Restaurantes con menús degustación Madrid.

Comentario: Restaurante francés en Barrio de Salamanca En Madrid hubo una larga época que no se inauguraban restaurantes de cocina francesa. Quizás el clima vanguardista de la restauración española esos años contribuyó a ello. En cualquier caso, su gran cultura gastronómica es muy valorada y siempre ha contado con muchos partidarios en la capital de España. Con el escenario descrito, la apertura de Lafayette en Las Tablas, resultó una ruptura en el mercado: se abría un restaurante francés y relevante. Pero claro, había que ir hasta allí para “comer francés”. Hoy (feb. 2019) en El Viso, se acerca a su clientela más natural y más afín por edad y cultura gastronómica. Local, de altos techos, fue una antigua vaquería y hasta hace poco, una taberna andaluza. Cálido y original por clima y ambiente, goza de una atmósfera acogedora ideal para cenas románticas y de amigos. Terraza remetida en el propio edificio, amplia, confortable, espléndida. Detrás de todo esto, como siempre, Sebastien Leparoux, gran jefe de sala, que por fin ha encontrado un inteligente empresario como socio: Humberto Pato.

Especialidades: Autenticidad y platos bien ejecutados, tiene todas las especialidades que uno/a desea encontrarse cuando va a un restaurante francés. Estupenda mantequilla d´Echirée de aperitivo. Ostras bretonas frescas y fragantes, que con una copa de champagne de la casa, resultan un entrante excelente. Caracoles beurre maître d´hotel: caracol limpio, rico y en su sabor.  Tartare de pato bueno, bien aderezado, con chispa; buenas patatonas fritas, fundentes por dentro y crujientes por fuera. La muy mediterránea bullabesa limpia, con rouille y tostada. Autenticidad, buen fondo, sabroso, con los pescados con un poquito hechos demás. Gigot de cordero recental a baja temperatura 7 horas, deshuesado; carne sabrosa, jugosa, tierna y bien acabado. Y como todo buen restaurante francés, acabar la comida con queso es “una obligación”. Tabla de quesos equilibrada y más que correcta. También: buen foie-gras mi-cuit. Flamiche de puerros, acelga y bacon (pasta quebrada con verduras). La mediterránea y tradicional pissaladière de Niza (una especie de coca mallorquina), con cebolla, anchoas y aceitunas muy agradable. El clásico magret de pato con coulis de frutos rojos. De postre rica tarta de limón merengada y cremoso de chocolate, goloso y de envolvente cremosidad... un buen final. Bodega con más de 100 etiquetas de vinos de ambos países. Buena relación de champagnes. Restaurante francés en Barrio de Salamanca

Comentario: Cena con espectáculo en Madrid. Desde 1997 este Café vienen ofreciendo una cena espectáculo en la que los propios “camareros” eran los cantantes que interpretaban una selección de fragmentos de las mejores arias, romanzas, zarzuelas y boleros. Incluso a lo largo del tiempo y las cenas, la gente también participaba y cantaba haciendo una velada muy divertida y en ocasiones mágica. En esta nueva etapa, desde el 4 de octubre a las 20:30 h. todos los viernes se representará semanalmente El Encanto de la Zarzuela. Un género musical popular y conocido, que forma parte de la señas de identidad del teatro lírico español. En el Café de la Ópera, volverá a sonar la zarzuela a través de los grandes autores del género y sus obras más representativas. Un espectáculo diferente, en una cena llena de emoción. Muy adecuado para grupos y no olvide que lo importante es el espectáculo, no la cena.

Especialidades: el menú de ‘El Encanto de la Zarzuela’ será: Preludio de la revoltosa acompañado de croquetas de jamón ibérico sobre patatas paja. Continuará con Preludio de la Verbena de La Paloma con crema de consomé de cocido con sus garbanzos crujientes. A continuación, intermedio de la Leyenda del Beso con bacalao al horno sobre salsa casera de tomate. Y como nota dulce, preludio de Agua Azucarillos y Aguardiente, seguida de un flan cremoso de queso de Guadarrama con helado de violetas y barquillo de Madrí. Cena con espectáculo en Madrid.

Comentario: 5 mejores restaurantes mexicanos Madrid. El Corte Inglés sigue su camino gastronómico de implantación de store food en sus tiendas. Una senda que otros grandes almacenes hicieron hace años con buenos rendimientos, y así siguen. Harrods el más significativo. En la tercera planta de Serrano ha repetido la oferta que tenía en el otro edificio: Streetxo y el antiguo Cascabel del mexicano Roberto Ruiz, que hoy se llama Can Chan Chan (amigo, confidente, cómplice). Un restaurante más formal que la antojería anterior. Ruiz también es el creador del reconocido Punto MX y su posterior evolución a Barracuda MX. Local cómodo, de agradable y cálida atmósfera. Informal, luminoso, con grandes ventanales, en el que dominan los grises. Sofás corridos en las mesas de dos y solo mesas bajas. Al fondo una pequeña barra, más para preparar cócteles y dar servicio a los camareros que para acodarse y compartir. Servicio amable y diligente todo realizado por mujeres jóvenes. Gran terraza. En Segovia, Ruiz tiene un huerto para proveerse, entre otros productos, de los diferentes chiles sin los que la cocina de allá perdería sabor y autenticidad aromática y picosa.

Especialidades: Tras 10 años de vida en España, en este nuevo proyecto el cocinero desea proponer lo mejor de los dos mundos, de los dos lados. Es decir, un mexicano que solo es posible en España. Carta corta con 18 platos (mejor, más perfeccionada), llena de libres y atractivas propuestas, que buscan ofrecer lo que nunca ha cocinado en sus otros restaurantes: ostra con naranja sanguina; refrescante y rica, aunque quizás marca demasiado la cantidad de aderezo sanguino. Tostada de atún rojo y sandía: el atún solo arrebata, mezclado con el acusado agua de la sandía se pierde un poquitín, diluye algo lo demás. Taco de chopitos una delicia de acompañamiento y rica salsa de base, con unos chopitos de calidad, bien fritos, secos y sin grasa. Taco de carnitas de cerdo con cangrejo de concha blanda. Excepcional. Por rupturismo de ingredientes, armonía, equilibrio y texturas diferenciadas. Taco de txuleta muy buena carne bien madura, sabrosa, fresco y picante del chile. Helado de leche de oveja de Fernando helado. Dicen que necesitan 17 litros para hacer 1.5 l. de helado. Bueno, sabroso, profundo, delicado. En definitiva, tostadas y tacos brillantes. Un original compendio de sabores y aromas con dejes de frescura por sus aderezos y lima exprimida. 5 mejores restaurantes mexicanos Madrid.

Comentario: Restaurantes en Aranjuez. Siempre se nota a los profesionales que les gusta su profesión, su negocio, que son aficionados militantes a la gastronomía y la disfrutan. Este es un negocio de detalles, por eso se suele percibir en sus propuestas, ideas, composición de las cartas, sugerencias. Da la sensación que Roberto Navidades es uno de ellos, se percibe que le gusta comer y beber, por algunos rasgos que reflejan este espíritu. Ubicado a unos 350 m del centro turístico. En la acera, delante de la puerta, mesas altas y una gran terraza para  cuando la temperatura lo permite. A la entrada, pequeña barra con alguna mesa alta llena de gente picoteando un almuerzo o aperitivo. En el interior dos comedores acogedores, casi siempre llenos, antendidos con trato familiar, amable y cercano. En fin de semana, hay que reservar. En la calle de la esquina, a 50 metros, A Terra Delapio, una taberna gallega con empanada, pulpo y buenos vinos. Ctra. Andalucía 95, 918 320 259.

Especialidades: Cocina de mercado y temporada, “de km cero”, en sus palabras. Sigue la partitura de la cocina tradicional contemporánea, con algunos detalles personales en algunas ejecuciones. Carta corta (mejor) y sugerencias del día acabadas con corrección y buen punto. Fragantes ostras Ille de Oleron, un buen comienzo. Empanadilla de pringá y su hummus: sabrosona, que denota suculento guisote. Buena ensaladilla con ventresca de atún rojo "en vivo y en directo": buena cremosidad y armonía de ingredientes con un topping supremo, el rico atún. Agradable y bien ensamblado el bacalao con alioli de miel y ajos negros. Estupendo rabo de ternera en guiso tradicional, con una salsa solvente y buen punto de la carne. También callos bien guisados con huevo frito que siempre mejora todo. Y puerros confitados con romesco de ajos negros. De postre, sorprendentes croquetas de chocolate con helado de plátano, fluidas, con sabor y ricas. Correcta tarta de queso de los Picos de Europa. Buen listado de vinos bien  seleccionados, con ofertas permanentes e interesantes etiquetas por copas buscando salirse de los tópicos. En definitiva, buena comida, buenos vinos y buena relación calidad precio. Restaurantes en Aranjuez.

Comentario: Los hermanos Muñoz Burgueño han encontrado su sitio en el mercado, su concepto diferenciador en la restauración madrileña: una mirada contemporánea de la cocina de las vegas de Madrid y su despensa. Son la 3ª generación de una saga familiar que ya lleva más de 30 años en el mercado. Iván aprendió de su madre Carmen la cocina tradicional, él ha añadido técnica, creatividad y buenos fundamentos, para interpretar el recetario de raíz de la Comunidad, en clave contemporánea. El otro hermano, Raúl, jefe de sala, buen sumiller y creador de una muy interesante bodega, con importantes etiquetas nacionales e internacionales. También su pasión y compromiso con la selección de vinos madrileños. Comedor clásico, amplio, importante, mesas bien vestidas (hoy casi una rareza) y bodega acristalada a la entrada.

Especialidades: Cocina de autor, desenfadada, creativa, divertida. Pero también tradición contemporánea con predominio de cocina manchega, castellana y la caza. Uno de sus puntos fuertes. Tres menús degustación por los que desfilan clásicos manchegos pasados por su creatividad: morteruelo, asadillo, gachas, mojete, tiznao, galianos, verduras de Aranjuez, bacalao, callos a la madrileña y la caza, claro. Comienzan los aperitivos con una infusión de caza finalizada en la mesa con infusión de hierbas aromáticas. Croquetas de jamón ibérico muy finas y crujientes. Ostra (albóndiga de corzo) de monte, viene dentro de una ostra. Perdiz a la toledana: un gran “buñuelo” delicioso, como el buñuelo crocante de queso y trufa; ambos los mejores entrantes. Rico y agradable su rupturista y conocido yogur de morcilla. Refrescante mojete de tomates semisecos, sardina y kalamata. Quisquilla en sopa de ajo; funciona muy bien el suave sabor del caldo con el crudo de las quisquillas. Soldaditos de Pavía y callos de bacalao a la madrileña: magnífico el bacalao frito y melosones los callos de bacalao a la madrileña. Wellington de ciervo, espectacular. De postre, mojito de melón nada interesante. Rosquillas de mi madre ricas. En época de fresas de Aranjuez, no hay que perdérselas, ni los postres elaborados con ellas. Mejores restaurantes Fuera del Foro.

Comentario: El madrileño es consumidor de cocinas étnicas de todo tipo de procedencias y culturas, lo viene haciendo con placer y regularidad. Si a esto añadimos que, varios cocineros españoles tienen experiencias en cocinas de variados países incluso con restaurante puesto, y que Diverxo ha creado escuela y tendencia, nos encontramos con una creciente oferta de interesantes restaurantes de cocina fusión y callejera (street food en referencia a cocinas del sudeste asiático). El éxito de algunos de estos restaurantes ha sido fulgurante y los clientes hemos tenido que hacer cola para comer sus platos. Éste fue uno de ellos cuando abrió a finales del 2014.Chuka es cocina "japochina", creada por emigrantes chinos en Japón. Y éste es un negocio sencillo puesto por jóvenes cocineros que se independizan. Por tanto, no hay que buscar decoraciones rutilantes ni grandes mobiliarios, sino la humildad de un lugar de comida callejera. Cocina a la entrada, seguida de la barra y contrabarra a la pared. Mesas altas al principio y bajas al final. Madera, hierro e informalidad propia del concepto de negocio. Lo sorprendente está dentro del plato. Aquí se viene a comer diferente: abanico de sabores potentes (dulce, salado, picante-ácido, agri-picante, agridulce), contrates, contrapuntos, rupturismo, frescura. Y lo mejor, una mesa llena de gente, a disfrutar y comerse toda la carta picando de todo. Aquí estuvo el japonés Aki y parece que hasta parte del mobiliario fuera de entonces. Rodrigo García Fonseca y John Husby cocinan a la entrada. Coincidieron en Kitchen Club y el segundo trabajó con David Chang en su famoso Momofuku de NY, famoso por sus bao buns. Lorena Mauri dirige la sala. Admiten reservas, tienen 2 turnos (no obstante, el gobierno del servicio y reservas es algo desconcertante).

Especialidades: Los buns, bocatas de pan taiwanés cocido al vapor, son para comerse todos ellos: de panceta asada con hoisin y pepino; de pollo frito con lombarda; de langostino tigre con salsas dragón y cilantro; el extraordinario de oreja, y el picante de cangrejo de concha blanda. A las gyozas les sucede otro tanto: la de vaca y kimuchi y la de cerdo con langostinos y salsa XO, ambas se desean con gusto. Los ramen todos estupendos, y son una comida en sí mismos: hiyashi chuka, con fideos fríos sin caldo y salchicha fresca; spicy miso, sopa de marisco y pescados; y el tori paitan cremoso y contundente con ave, panceta y verduras. El picantito dok boki, pastelitos de arroz glutionoso planchado con chipirón y salsa coreana, correcto. También correcto el tonkasu de presa ibérica (rebozada en panko) y mejores los mejillones thai al curry verde. De postre mochi donut con helado, solo correcto. Y cerveza para comer, bueno y cócteles interesantes.

Comentario: 5 mejores bistrós Madrid. Dos profesionales: Charlotte Finkel, parisina, sala, (Four Seasons), él Mario Sánchez, gaditano, cocinero (Four Seasons, Diverxo, Berasategui, Arola, Ángel León). Ponen casa propia, con buenos fundamentos profesionales y el deseo de mostrar una narrativa personal de la cocina sencilla. El restaurante es una mezcla de casa de comidas contemporánea y bistró con barracocina, donde comer mientras presencias la finalización de los platos. En lo decorativo, es agradable e informal, aunque quizás le falta cierta calidez. Tal vez su estructura alargada y dividida en tres módulos”: entrada con mesas bajas y una mesa comunal; la barracocina y otro comedor de mesas bajas al fondo. Madera, algún mármol y desenfado, su esencia también en los platos. Charlotte, sumiller y directora de sala, ha creado una bodega bien seleccionada con las DDOO de país vecino y pequeños productores: 70 etiquetas, 20 por copas. Ni que decir tiene que Cádiz tiene una buena representación.

Especialidades: En lo gastro, buena técnica y mucho oficio para concretar interpretaciones de cocina francesa y el Sur de España. Incluso en el mismo plato. Cocina con buenos cimientos, buenas salsas que entrevén lo que no está en el plato. Cremosísimas y sabrosas croquetas de puchero. Rica rica la croque Monsieur: jarrete confitado desmigado en brioche tostado con queso cantal. El chicharrón gaditano es otra buena ejecución: panceta largo tiempo cocinada, prensada, cortada y aderezada con tomates semisecos y manteca colorá. El steak tartar, servido con croissant tostado y bearnesa, falló el aderezo, a pesar de que es uno de los platos reconocidos de la casa. Correctas las albóndigas de pato, magret de pato curado y chimichurri. Estupendas mollejas de ternera crujientes por fuera blanditas por dentro, con salsa de pimienta y puré de chirivía. Magnífico postre de chocolate negro con aceite, sal y almendras.  También buenas ostras fine de claires. 5 mejores bistrós Madrid.

Comentario: Nuevo restaurante en Retiro. El Retiro es la Primera División de las mejores tabernas y casas de comidas de la capital: están las mejores, siempre nace una nueva, siempre mejora a todas porque la que no hace las cosas bien, no prospera. La gente tiene tantas alternativas, tan buenas y próximas unas de otras, que o fidelizas con las mejores recetas y puntos de acabado supremo, o la gente se va al portal de al lado. Hoy tenemos un proyecto en sus inicios: una nueva taberna contemporánea + un restaurante en construcción. De momento, una barra (Barra X) con una pequeña cocina y una terraza, que para comer sin la compañía “el bicho” es bienvenida y deseada. En construcción está el restaurante, con su cocina, comedor y estupenda terraza interior, que aportará mesas y gran luminosidad a la sala. Decoración moderna, informal, joven, con ladrillo visto pintado de blanco que da cierta limpieza, familiaridad y afinidad al conjunto.

Especialidades: Por tanto, estamos en los inicios de un proyecto que busca su sitio mercado y en el plato. En la sala los dueños del proyecto crean buen clima, miman el momento del cliente y acercan su producto a la gente. En la cocina Diego Manzanares, un profesional con experiencia en Zalacaín, La Parra y La Verónica quiere hacerlo bien. Una carta ecléctica con los platos que gustan al mercado. Estupenda navaja encevichada: a la plancha, con aderezo cítrico de ají, cilantro y plancton. Bien hecha la alcachofa confitada y a la plancha, con romesco de cacahuetes y foie mi-cuit. Rico pulpo asado y crema ácida y de calabaza. Logrado y sabroso chop suey de solomillo madurado con vegetales y hierbas aromáticas Cochinillo al vacío, costreado al horno, con col china escabechada y barbacoa de kimchi; carne melosa y costra crujiente aunque no homogénea. También merluza con crema de zanahoria y papillote de verduras. Postres diseñados por Fran Segura, campeón del mundo de del World Chocolate Master 2014. Sobresaliente crumble de manzana pink lady y helado de vainilla. Gratificante milhojas de crema de queso montada con pasta brick. Nuevo restaurante en Retiro.

Comentario: Restaurantes navarros Madrid. Ha sido históricamente un conocido embajador de la verdura y proveedor que surtía de buenas hortalizas de la huerta de Tudela a los mejores restaurantes de Madrid, San Sebastián y otras partes de España. Incluso llegó a crear el huerto urbano más grande de España, en la azotea del hotel Wellington. También fue conocido por aparecer cocinando en el programa gastronómico de TVE, Un País para comérselo, con Imanol Arias y Juan Echanove. El confinamiento le cerró el restaurante y ha vuelto a Madrid de la mano del Grupo La Fábrica (fin 2023), en un local céntrico, bien decorado y con un gran número de mesas. Luminoso para las mesas del primer comedor de la entrada, a continuación, una barra larga con mesas enfrente y sofá corrido. Por tanto, estamos ante un hombre que por tradición familiar ha trabajado la huerta de Arguedas y Tudela. Conoce este producto como nadie y es un auténtico especialista. Ese es el espíritu que habita en esta casa. Hoy también sigue teniendo una "lechugotecas" de escaparate y comedor, con lechugas hidropónicas para el consumo del restaurante. Siempre caras conocidas del mundo del espectáculo. Correcto servicio.

Especialidades: Aquí se viene a comer cosas sencillas, Floren no es un chef figura ni un gran técnico, es un cocinero popular de cocina casera, de modo que: Tudela y Arguedas declinadas en diversos platos de verduras. Tomates "feos de Tudela" de textura carnosa, gran sabor y casi sin piel ni pepitas. Alcachofas en flor confitadas, muy buenas. También las hacen fritas con foie. La borraja, otra de sus clásicas, suele ponerla sobre su crema con patata. Es de una sencillez estupenda. La menestra de temporada con media docena verduras es para no perderla de vista. Las pochas, otro de los símbolos de esta tierra y de esta casa, las cocinan con verduras y están muy ricas. Tampoco podemos olvidarnos del cardo rojo en su momento. Y si quieren un plato racial y sencillo de los que llegan al corazón: pimientos de cristal asados con huevos fritos y chistorra. En temporada, espárragos de Tudela con huevo poché Dicho todo este previo sobre las verduras, que son el fundamento del restaurante, que la sencillez siga siendo el camino de la elección: buenas migas de pastor de las Bardenas con huevo poché; estupendo bacalao al pilpil, rica merluza rebozada con pimientos de cristal. Y en carnes destacan: el magnífico guiso de pollo como lo hacía mi madre, las manitas de cerdo guisadas, las mollejas de ternera a la brasa con foie. En el pasado tenían unos buenos callos de la casa. De postre, sorbete de tomillo con limón, excelente. Correcta selección de vinos clásica. Servicio aceptable.

Comentario: Las mejor paella de Madrid. Establecimiento tradicional y familiar que comienza su actividad en los 60´s cuando Gabino del Valle inaugura una tasca de vinos a granel. Su hija Juani y su marido Valentín lo convirtieron en una casa de comidas de la sierra madrileña. Hoy son sus hijos Rubén y Óscar, los que regentan el negocio. Éste último en la cocina. Atractivo comedor, cómodo, agradable y con buen ambiente, con salida a una gran terraza acristalada, quizás para fines de semana y días con clima amable.

Especialidades: Pues resulta que ganaron el concurso internacional de paella valenciana de Sueca del 2021. El más reconocido de España e incluso del mundo, como ellos mismos dicen. Ojo con el concurso, que ya han celebrado más de 60 ediciones del certamen, al que acuden cocineros de todo el mundo. La paella, que la ofrecen solo los jueves, presenta un buen equilibrio de ingredientes (pollo, conejo, garrofón, alubias verdes, tomate rallado, ajo y azafrán) y sabores. Un arroz de capa fina, con perfecto punto de cocción y del socarrat. Al llevarnos la paella a la mesa el propio cocinero y yo "rasgar" la paella con las puntas del tenedor para ver el punto, nos dijo: "me ha quitado el sueño durante meses, porque una cosa es ganar un concurso y otra hacer una buena paella todas las semanas". Pero debe de tener más éxito el cocido, porque lo hacen 2 días: martes y viernes. Antes de la paella, comimos una ensalada de buenos tomate raf y oreja a la plancha, que es su plato estrella, del que hacen decenas de kilos. También cabrito serrano asado a baja temperatura. De postre, hojaldre (húmedo) con nata. Las mejor paella de Madrid.

Comentario: Espacio Abierto Gastronomía Social. La Fundación Cesal es una ONG internacional, con presencia en 16 países, cuyo objetivo es ayudar a desarrollarse y mejorar la vida de las personas más vulnerables. Involucran a los individuos en un proceso de desarrollo, buscando su capacitación profesional y mejora continua dentro de su comunidad. La gastronomía social es uno de los caminos y actividades de esta Fundación, para el desarrollo e inclusión de estos individuos: formación, generación de conocimiento, prácticas laborales, inserción sociolaboral juvenil y consecución de empleo. Entre los diferentes lugares de trabajo / escuela que poseen, Espacio Abierto Quinta de los Molinos, es un atractivo “territorio escuela”, donde chicos y chicas desarrollan las prácticas propias del sector de la restauración. Espacio Abierto Quinta de los Molinos es una escuela taller, impulsada por el ayuntamiento e instalada en una gran casona den el parque. Un café restaurante jardín donde chicos y chicas de 16 a 23 años, se forman con los valores necesarios para desarrollar la actividad profesional en el mundo de la restauración. Después de esta fase de formación en Espacio Abierto, realizan dos meses de prácticas en restaurantes como Sa Brisa, Ramsés, Cebo, Grupo Larrumba, Yakitoro, Coque o La Tasquería, entre otros.

Especialidades: La Quinta Cocina. Los alumnos aprenden día a día de la mano de los y las mejores maestros/as y profesionales: David Alonso, gerente. Chema de Isidro chef ejecutivo. Sara Seco jefa de cocina. Alma Soriano, Mónica Jacome y Pedro Corpa, sala. La Quinta Cocina, un restaurante y un café jardín donde pasear niños o mayores, tomar un café, un refresco, un tentempié o comer. Y todo ello en un ambiente natural y unos jardines espectaculares. No se admiten reservas. Las mesas se irán ocupando por orden de llegada. Atendido por los alumnos de la escuela de hostelería La Quinta Cocina. Espacio Abierto Gastronomía Social.

Comentario: Mejores restaurantes en Majadahonda. Abierto en junio 2016, este es el último de los tres establecimientos de la sociedad. El de más nivel gastronómico. Está situado en una zona abierta de una avenida amplia de doble dirección, con arbolado.Local amplio, con diferentes ambientes, barra a la derecha, dos comedores, uno para picar y otro de mesas bajas. Gran terraza exterior muy deseada cuando el tiempo lo permite. En verano siempre llena. Todo ello acogedor, decorado con corrección y confort. Siempre gente en la barra tomando el aperitivo y medias raciones, que añaden valor en esta casa, porque el producto es bueno y el punto también. Un pequeño problema, a veces huele a cocina en alguna zona de la casa.

Especialidades: La carta es fiel reflejo de la mayoría de las cartas actuales, en las que prima la comida sencilla y tradicional, con ejecución contemporánea. Patatas bravas con salsa de tomate, chiles ahumados y alioli de ajo negro; un correcto aperitivo para tomarse un vino en la barra. Como la ensaladilla que también se come con gusto, o las cremosas croquetas de jamón. Tomate rallado con crema de aguacate, pimiento asado, piparra y anchoas; rico y muy recomendable por sencillez y equilibrio de ingredientes. Huevo de corral a baja temperatura, patatas, sofrito, gamba blanca y alioli de ajo negro; bien conjuntado… allí donde hay huevo siempre está bueno. Las alcachofas con jamón o foie y los calamares o rabas santanderinas también son recomendables. Diferentes cortes de carnes rojas maduradas, con distintos tipos de reses, edades y procedencias; otro de los atractivos de la casa. Tienen solomillo en tartar y a la plancha con foie. Lomo bajo, T-bone y cote de boeuf de diferentes edades por corte. Además, lomo bajo y alto de carnes premium. Todas asadas con corrección. Si la carne no es su fuerte tienen pescado según mercado. Los postres son caseros en los que destacan su tarta de leche. Son simpáticos y atentos en el servicio y la carta de vinos es interesante. Mejores restaurantes en Majadahonda.

Comentario: Nuevos restaurantes japoneses nikkei Madrid. Luis Arévalo ha cambiado de nuevo al primitivo local de Kena, de donde parece que nunca debió haber salido. Muy adaptado a su estilo, con una barra de sushi para 7 comensales y más propio de su camino de siempre: personal, cercano, directo, cocina nikkei y Perú. Abandona por tanto la cocina global, de fusión y se dedica a lo que siempre le apasionó y por lo que fue valorado y admirado tras triunfar en Kabuki, 99 Sushi Bar y sobre todo en Nikkei 225. Elabora una cocina de autor, con técnica japonesa y frescura peruana. Sus creaciones trascienden a la cocina japonesa, peruana y nikkei (japo-peruana). En sus platos hay cosas que podrán parecer muy japonesas y otras muy peruanas… “lo que hago es ponerle recuerdos gastronómicos: sabores, aromas, texturas, olores de lo que he ido comiendo a lo largo de la vida, la mezcla de esas dos cosas da este resultado”. Arévalo es técnica, pulcritud, limpieza, disciplina, humildad y disfrute. No es japonés, no es nikkei, no es peruano. Es él y todo lo anterior. Ocupa el local donde estuvo el restaurante francés El Comité, adecentado para la ocasión con escasos elementos, pero esa también es la tradición nipona. Es decir, local sin pretensiones, sencillo, funcional. Ya habrá tiempo para más. Barra con sus 7 asientos, donde oficia Luis con su refinamiento tranquilo, brillante perfección y maestría de cortes.

Especialidades: En esta nueva etapa, el restaurante tiene carta y menú degustación omakase, (el chef hace el menú degustación y te va dando de comer su recomendación). El menú degustado estuvo compuesto de: gyozas de pollo con ají amarillo. Un entrante lógico y fácil de comer y de registros. A continuación, una serie de tartares con diferentes cortes y texturas, muy buenos por calidad de producto y por “chispa”, personalidad y equilibrio de ingredientes: tartar de chicharro con ají, fantástico. Tartar de atún, huevo de codorniz, patacones, salicornia y salsa de ajíes. Espléndido por su perfecta unión y punzante equilibrio. Para comerse más de uno. Tartar de carabinero con consomé de su cabeza: delicada textura de las colas, sabor delicado, buen “mordisco” y mejor consomé de sus cabeza. Tratar de ventresca con wasabi, refinado y bien ejecutado en fondo y forma. Y a continuación, la gama de nigiris que todos son buenos y se van sucediendo con las armonías y contrapuntos que los ingredientes muestran. Salmón, ají amarillo, picadillo de cebolla y rocoto. Espagueti de calamar con rabiata de ají panca. Sardina con tomate arbequina y confitura de jengibre. Salmonete con alioli de yuzu y ajo frito. Besugo con salsa chifa. Foie con gelatina de maracuyá, muy rupturista con todo lo anterior por textura, sabor y aderezo. Papada ibérica con confitura de rocoto y migas de tempura. Taco de corvina caliente con boniato y ají limo. Helado de lúcuma con mousse de chocolate y frutos rojos. Bodega justita, pero con una correcta selección de tipos y etiquetas. Nuevos restaurantes japoneses nikkei Madrid.

Comentario: Las 5 mejores novedades restaurantes Barrio Salamanca. Patxi Zumárraga, creador de Fismuler junto con Nino Redruello, tras 7 años de trabajo en común, acordó con su socio que necesitaba una nueva vida profesional fuera del Grupo La Ancha. Un nuevo proyecto donde concretar su talante personal, su personalidad y estilo gastro. Y se convirtió en realidad, porque su socia al 50%, ex-directora de Fismuler, Patricia Hramboure, también quiso dar el mismo paso para responsabilizarse de las tareas de gestión y sala. Encontraron el amplio semisótano del Barrio de Salamanca, (tan afín a La Ancha y a Fismuler), que antes fue Esbardos y Le Kañí, que nadie conoció. A la vez se pusieron a trabajar en la búsqueda de pequeños proveedores: pescadores de bajura y caseríos principalmente vascos, aunque también utilizan otros proveedores de otras zonas. Mesas de madera, candelero con vela encendida, diversidad de sillas tradicionales que tuvieron otra vida anterior y banco de obra con cojín corrido. Carta amplia con una docena de “pintxos”, o pequeños bocados individuales “solo para ti”, muy adecuados para una especie de menú degustación personal.

Especialidades: Patxi nada más verle inspira confianza como cocinero, se ve que le gusta comer bien. Además, cuenta con un curri excepcional: elBulli, The Fat Duck, Nobu Londres, Mendigoikoa, Gaminiz. Su cocina es de sabores diáfanos, con productos que transmiten su enjundia… de guisos suculentos, de verduras bien tratadas, incluso por un camino diferente, como el celerí glaseado como un magret… y de pescados y carnes bien seleccionados. La desmenuzada nécora a la brasa con ajo y mantequilla es un bocado sutil y delicado, como la cococha y tripa de bacalao Club Ranero, de melosidad doble y conjuntada textura. Maravillosa la suculencia del morro frito con aliño de choricero. Ricas pencas de acelga con tartar de atún, aunque parece levemente cocinado, para comerse media docena. Espaldilla de conejo con glasa de cacao, correcto guiso, aunque no soy muy de conejo si no es de campo. Le faltaba algo más de salsa y no solo la pegada a la carne. También bocarte de anchoas un matrimonio de tres: anchoa en salazón, bocarte frito y boquerón en vinagre. El postre de chocolate con urras tostadas, poco interesante. Dejamos para otra ocasión el sugerente guiso de cabracho (itsaskabra) en 3 vuelcos y el helado de manzanas asadas con hojaldre caramelizado. No hay menú degustación, le aburren a Patxi y ya a media España. Buena definición de la carta de vinos (70 etiquetas) con una selección completa de etiquetas heterogéneas, de grandes marcas y de nuevas ideas, en las que dominan los tintos. Muy buen ambiente, gente maja y amabilidad por delante. Las 5 mejores novedades restaurantes Barrio Salamanca.

Comentario: Comer sano en Madrid. Una buena idea de negocio basada en lo verde, sano, saludable, responsable, sostenible y cosmopolita, claro. Todas ellas definen una actitud, un original camino en el tienen cabida todas las sensibilidades a la hora de compartir mesa o nutrirse a diario: vegetarianos, veganos, celíacos, raw, intolerantes a la lactosa... todos los públicos en definitiva. Un proyecto inteligente y de éxito (5 restaurantes en 3/4 años, 1 en Barcelona), nacido de una tendencia gastronómica de estos tiempos globales: fast casual. La mejor expresión y respuesta de la sociedad, a la manera de comer "a diario" en el siglo XXI: 1) Moderación, hábitos saludables, productos naturales y estacionales. 2) Productos de temporada, naturales y de proximidad (no todos, claro). Sin aditivos, conservantes, colorantes ni azúcares añadidos. Varios de ellos orgánicos y sin gluten. 3) Joven, rápida, asequible... incluso puedes componerte tu propio plato. Benjamín Bensousan, de origen francés, es el cocinero responsable del proyecto. Le conocimos con Sergi Arola en La Broche, Le Cabrera y Cien Llaves. Se nota su mano, porque hay varios platos de inspiración magrebí y árabe. Restaurante fácil, sencillo y desenfadado, que no tiene reservas. Te pones a la cola en mostradores frente a la cocina en marcha y eliges lo que deseas comer. Te lo sirven en las mesas individuales o para compartir. En Castellana, AZCA, el local es una especie de "invernadero" con look industrial, muy luminoso, con plantas verdes que cuelgan del techo. Todos tienen esta imagen aproximada. En AZCA tienen una gran terraza que ponen en marcha en cuanto la temperatura lo permite. El local de Hortaleza, tiene un agradable café speciality, con producto de comercio justo y sostenible. El servicio es el propio de estos establecimientos de pedido en el mostrador: impersonalizado. A diario siempre está muy lleno y dependiendo de las horas hay largas colas.

Especialidades: Recetas y ejecuciones sencillas, con predominio de elementos vegetales saludables, coloristas y de temporada. Platos fríos y calientes que se mezclan en dos grandes apartados: proteínas (atún, pollo, ternera, tofu) y ensaladas, aunque también se ofrecen guarniciones varias y salsas. El camino es elegir una de cada. También una guarnición si se desea. Por ejemplo: pollo marinado al horno josper con chipotle, que está bien. Ternera marinada con hierbas al horno de carbón, también correcta. Tataki de atún blanco con ponzu y sésamo, agradable. Ginger pulled pork marinado y asado, con piña y lombarda; también tofu. Ensaladas muy verdes y variadas: boles con varios ingredientes, en general poco aderezo: kale quinoa Caesar con picatostes (rica); avocaco supergreen, correcto, con: aguacate, espinacas, rúcula, tomates cherry, pepinos. Otra: ginger queso de cabra crunch con boniato, alubias verdes, nueces, rúcula, queso. Guarniciones muy variadas que van desde las verduras de temporada, al hummus, arroz o quinoa... pasando por berenjenas, patatas o boniatos. También disponen de platos para compartir, rico el hummus. Postres correctos, sin azúcar ni gluten: raw duo de chocolates con bayas del bosque. Brownie de moka y coliflor. Agua del grifo filtrada (lo más caro), zumos, cerveza y media docena de vinos. Comer sano en Madrid.

Comentario: Mejores restaurantes de la sierra, Madrid. Magnífico hotel rural ubicado a la entrada a la entrada de Collado Mediano, en un atractivo paraje y una importante casona del S. XIX con espléndido torreón. Paz y silencio sin ruidos callejeros. Un lugar perfecto para darse un paseo por la montaña madrileña y recalar a la hora del aperitivo, antes de comer con reserva en fin de semana. Tienen pocas mesas. "Vaya sin reloj", es el mejor camino para un aperitivo entre la paz y la sombra de un jardín natural y sencillo. Tras el jardín, platos de un joven cocinero contemporáneo con solventes ejecuciones de base tradicional, con chispazos de vanguardia. Comedor - invernadero acristalado, muy acogedor, luminoso y relajante. También dispone de piscina abierta en el verano y otra “caja de cristal”, otro salón para disfrutar una copa y de la paz que genera su ambiente.

Especialidades: Rubén Amro, mejor cocinero de España y participante del concurso internacional de cocineros, Bocuse D'or 2022. Es una joven promesa que ha trabajado varios años con un buen maestro: Joaquín Felipe. Trabaja los productos de temporada, por lo que la carta y su menú degustación evolucionan con ella. Correcto ceviche de sardina a la madrileña. Frescor del nem de atún rojo con guacamole y crema agria. Croqueta líquida de cecina ahumada (cada vez más cecina en las croquetas), no líquida, pero buena y muy sabrosa. Buena aleta de raya en salsa meunière ibérica, queso ahumado y miel de calluna. Una pena porque el plato está muy bien, pero el queso dominaba; quizás un pequeño fallo en el emplatado. Carrillera muu thai panaeng curry, espléndida, por autenticidad y sabor y equilibrio del acabado. También diversos arroces y pichón asado chateaubriand. De postre: la rupturista y rica torrija espumosa y horchata granizada; chocolatada a la madrileña, otra divertida opción. Mejores restaurantes de la sierra, Madrid.

Comentario: Nueva casa de comidas Retiro. Juanjo López Bedmar, La Tasquita de Enfrente, es el creador de este proyecto, también de la vecina Retasca. Ambas tienen a otro gran cocinero-empresario, José Andrés, como socio financiero de dichos proyectos. Ocupa el local donde estuvo El Cocido de Carmen, antes de que el matrimonio Pedraza se trasladase a su nuevo emplazamiento. Es un local pequeño, acogedor, cálido, con la cocina integrada y “sin humos”. En Madrid hemos pasado muchos años con un cocido muy bueno y varios correctos. Pero afortunadamente en un par de años, ha cambiado el panorama con la irrupción de estos nuevos actores mencionados, que han elevado el nivel de forma determinante. El objetivo es ofrecer un cocido personal, diferente, propio de la factoría La Tasquita de Enfrente: seleccionados proveedores, buenos y variados ingredientes, buena ejecución y pase o vuelcos del servicio más completos y atractivos de comer por el fondo o la forma. Desde su inauguración el cocido ha ido ajustándose a las estaciones del año y tal vez a un bolsillo más asequible. Quizás el precio de algunos productos (anguila, trufa, etc.), sacaban al plato del mercado, aunque este cocido no esté llamado a ocupar la franja media del mercado. De vez en cuando invitan a un reconocido cocinero de otro restaurante, para que un día haga el suyo y puedan disfrutarlo admiradores y aficionados. Hoy hay dos propuestas: con un aperitivo por delante de La Retasca, o sin él. Lo que varía es el precio del aperitivo. Con el tiempo han evolucionado a una casa de comidas, con menú del día y

Especialidades: De entrada una croqueta de compango estupenda. Siempre digo que las sopas de cocido buenas son "las marrones", las que tienden a este color porque han reducido bien en el fuego. Nada de clarividencias que indican poca reducción e ingredientes. Esta quizás es la mejor sopa de cocido de Madrid. De fideos, sabrosa, amplia y profunda, con la complejidad lógica por todo lo que entra en sus cazuelas y sin una gota de grasa. Como te ponen la sopera al medio, repites claro. Porque cuando es buena, no hay sopa que la iguale. Cebolleta y rabanitos junto a la sopera. El vuelco de verduras es abundante, con algunas de ellas poco habituales, como nabo y puerro. Pero sí repollo, zanahoria, patata y unos garbanzos perfectos de punto y sabor, pero ásperos. Este cocido no se merece estos garbanzos. Este pase incluye también una "pelota", que no es relleno castellano ni pelota catalana. Es un estupendo albondigón de buenas carnes de cerdo crudito. A continuación un buen hueso de tuétano aderezado con apio. Para los que gustan de esta refinada delicia para comer con pan tostado. Sin olvidar que luego vienen los tocinos y hay que seguir con el pan tostado como soporte. Rico chorizo, mejor tocino (2) y varias buenas carnes: muslos de pollo, morcillo de ternera, carrilleras de cerdo y morcilla de Burgos. Estos vuelcos se acompañan con buen aceite de oliva virgen y salsa de tomate. De final un helado de violetas correcto, “palomita” y unas pastas perrunillas. Nueva casa de comidas Retiro.

Comentario: Nuevo restaurante taurino Madrid. Casa Toribio (1994), que hemos tenido en los5mejores como restaurante taurino durante muchos años, ha cambiado de dueño y de nombre. Sigue siendo uno de los máximos representantes del ambiente taurino madrileño: por tradición, historia, ubicación e influencia. El nuevo empresario de La Divisa, es un ganadero toresano (no de bravo), pero sí en su ámbito e influencia. Y quizás, por identificación con este mundo, la razón del inicio este nuevo proyecto. El restaurante tiene la exclusiva de los rabos de toros que se lidian en la Plaza de Toros de las Ventas y de otras plazas de España. Y lo hace constar mostrando el contrato incluso en la puerta del restaurante. También casi tiene la exclusiva del gin-tonic de antes de las corridas. La pequeña barra, concilia el antojo de los aficionados por la copa refrescante y los comentarios sobre qué les espera la tarde y “la repetición de la jugada” del día anterior.

Especialidades: De modo que venga predispuesto a finalizar con un plato del tradicional rabo de la casa, pero por encima de todo, a una comida “de picoteo”, variada, divertida y llena de tipismo, casticismo y calidad. Buenas gambas y quisquillas. Jamón ibérico magnífico por infiltración, textura y sabor. Otro tanto sucede con las buenas anchoas y los extraordinarios boquerones en vinagre de la casa. Si tuviesen los tomatillos rojos de La Palma (Food Revolution), no se los pierda. Es el más dulce que hayamos probado nunca, por lo visto cuestan 1 € cada uno. También un rico pimiento morrón pelado, lleno de agua y delicado. La ensaladilla rusa es otro de los platillos que pueden formar parte del pedido. Agradables croquetas y estupendas alcachofas confitadas y en flores, bien ejecutadas. Espárragos en conserva gordísimos. Los callos a la toresana son poco atractivos, faltos de la untuosidad, melosidad y complejidad de sabores que debe de tener este guisote. Correcto rabo, con buen sabor, bien de punto que le hace desprenderse del hueso y buena reducción de la salsa. Quizás falto de chispa vinícola para nuestro gusto. También como ganadero tiene buena carne que ofrecer para finalizar la comida un buen chuletón o un solomillo con patatas. De postre: el maduro, intenso y sabroso queso zamorano, si le gusta, no se vaya sin él; una correcta tarta de queso y otra de chocolate, de sencilla ejecución, muy de ama de casa, pero rica y golosona. Nuevo restaurante taurino Madrid.

Comentario: Nuevos restaurantes en Castellana. Sencillo y divertido para lo cotidiano, la informalidad es el fundamento de su atractivo en el plato. Sabores conocidos, empaquetados en inesperados acabados, con una vuelta de tuerca de fusión asiática o latinoamericana. Su carta no es clónica, sus sabores son de siempre, pero sus platos no son intercambiables de cocina. A los mandos de la cocina, Brayan Sevilla, que trabajó con Ramón Freixa y ya participó en este concepto de restaurante, nacido en Tarifa hace unos años. Informalidad también del local, colorista, acogedor y de fácil integración. En la planta superior, algunas mesas más y sofá corrido para el tardeo, tal vez para una copa con picoteo por delante o por detrás.

Especialidades: Buenos chicharrones gaditanos con salsa tropical. Refrescante y seductor saam de cazón en adobo con crujiente de cerdo. Estupendas gyozas de ají de gallina. Singular y agradable finalización del cerdo agridulce de presa, con pico de gallo y chile mexicano. Correcto atún en tataki con crema de ají. Rico acabado de los mejillones alegres con chispa de curry rojo. Mejor nivel en todo esto que en los postres: cheesecake con puré de mango y chocolate con helado de avellana. Sumiller con criterio e interés por crear una bodega con etiquetas deseables y vinos apetecibles. Servicio entrañable y atento. Nuevos restaurantes en Castellana.

Comentario: Los mejores perritos calientes Madrid. David Muñoz es un cocinero total: capacidades creativas extraordinarias, ilimitadas dimensiones profesionales y extraordinarias facultades empresariales. Ya ha sido capaz de crear cuatro negocios de éxito con un mismo lenguaje pero posicionamientos diferentes, casi antagónicos (de perritos calientes a restaurante gastronómico). Así las cosas, parece que otro nuevo proyecto está por venir a finales del 2021. Su cocina (como sus perritos), tiene un don supremo de su compleja unicidad: el brillo especial de creaciones multicapa. La colosal capacidad del cocinero para superponer sabores, aromas, texturas, temperaturas... y "descolocar" al comensal con abundantes percepciones y sensaciones en un solo mordisco. Esto engendra, suscita, una deseabilidad y admiración tan grandes, como “las colas” para comer la cocina de cualquiera de sus negocios. La marca Goxo delivery, que puspo en marcha durante el confinamiento, ha funcionado como un tiro tanto en Madrid como en Barcelona. Bajo este mismo paraguas de marca ha puesto en marcha esta fragoneta gastro (food truck para el mercado). Ubicada en la nueva puerta de ECI, con acceso desde la calle Orense y acompañada con una decena de mesas de terraza. Insuficiente, como es lógico, para las horas o días de gran afluencia, por lo que la gente tiene que buscarse la vida para comer de pie en código fast food. Los primeros meses, la cola de espera para comprar los perritos era de 50 metros, parece que se ha calmado la cosa, no obstante, las "horas de marcha" y los fines de semana "la cola" sigue su curso.

Especialidades: Carta corta, propia de una fragoneta gastro: dos perritos calientes, un plato de dumplings al vapor rellenos de verduras al wok, acompañados por una boloñesa de vaca, chorizo ahumado de león, cinco especias chinas, espuma de parmesano y jugo de mostaza y miel. Gran combinación de ingredientes, gran potencia de sabor. Raviolis chinos al vapor, de gambas con suquet tailandés lemon gras, y aceite de pimentón de la Vera. De postre, la tarta de queso de la Pedroche cocinada con queso fresco, parmesano, galleta con mantequilla tostada y pimienta de Sichuan. Los perritos se componen de salchichas Frankfurt carnosas, ahumadas a la brasa, de buen tamaño y gran calidad, acompañadas de pan de brioche esponjoso con mantequilla tostada y una inundación de contrastes, cremosidades y crujientes. El Japocoreano lleva: salsa de cacahuetes, coco y lima kaffir. Mermelada de tomates maduros y tamarindo. Migas de cacahuete picantes y mini boquerones fritos. Jarabe de soja y jengibre. Crujientes de arroz y ajos negros. El perrito Mumbai: kétchup casero de kimchi. Mayo de yuzu y trufas negras. Yema de huevo cremosa. Migas de tempura. Como perritos son caros (12 €), pero claro, son de una marca con gran valor añadido. De beber: refrescos, cerveza, agua y un par de cócteles: una margarita thai con mezcal y una caipiroshka de kumquats. Los mejores perritos calientes Madrid.

Comentario: Mejores restaurantes coreanos MadridMyungsun Luke Jang, tras sus experiencias en El Bulli (acampó delante de su puerta hasta que lo admitieron) y Mugaritz, catedrales de la creación disruptiva y técnica maestra, ha sabido dotar a sus platos de: originalidad seductora, pensamiento, identidad, estructura, texturas y sabor. También juego y humor, quizás su carácter, amabilidad y buen humor, influyen para agregar diversión al plato. Su paso por el vasco Urrechu, también deja rastro en sus creaciones. Se percibe un cocinero contemporáneo (coreano), de mirada apasionada, con personalidad e instinto. Sus más brillantes resultados, los obtiene cuanto más populares y conocidas son las ejecuciones que rediseña. (+) Con partituras españolas o coreanas ya escritas, recrea platos y tapas. Surgen nuevas y creativas armonías con ingredientes de aquí o allá, o una mezcla de ambos. Cultura, costumbres, memoria… son la mejor manera de “atar” las creaciones a un cocinero, un camino y un restaurante. Por supuesto, también hay varios platos personales, coreanos.

Especialidades: Así las cosas, la gilda coreana es magnífica: atún rojo con sésamo, piparra, shiitake, loto encurtido y kimchi nivel 6 de picante. Rica y con picante coreano - español, llevando el concepto del pincho al camino coreano. Una pena que las coriáceas piparras estropeen el plato. Muy bueno el ssam de panceta ibérica: panceta con hoja de dragón, salsa ssam y cebolla morada. Bao bun coreano con kimchi y crujiente de ibérico, realmente bueno y brillante. Fantástico el equilibrio de ingredientes, texturas, cremosidad de salsas. Atractiva presentación y chispa calentita que te pone en el mapa de lo que comes. Los tacos de cochinillo asado: cochinillo a baja temperatura, con crujiente de piel, kimchi, spaghetti de guindilla y ssam de hierbas. En su sabor y buena compañía, pero el valor más deseable se había marchitado. La tosta crujiente de la piel, si no está recién horneada, volverla a poner en su sitio tras el frigorífico… Bibimbap, fantástico: erizo, verdura salteada y huevo de codorniz sobre arroz y salsa picante gochujang. K.F.C. (Korean Fried Chicken): muslos de pollo frito estilo coreano, queso de hierba fresca y daikon. Especialmente bueno por chispa y por la brillante recreación de lo imitado. El rulo de arroz glutinoso es comestible, no es esa goma imposible de masticar y tragar. La salsa que acompaña y rodea al pollo es melosa, sabrosa, de gran intensidad. Y de postre, pura memoria vasca: postre de queso Idiazábal de sidrería: falsa nuez de chocolate rellena de membrillo y con crema de queso Idiazábal. Mejores restaurantes coreanos Madrid.

Comentario: Mejores pizzas Madrid. La restauración, la cocina, siempre te dan sorpresas agradables. La sencilla autenticidad de un restaurante que no conocías… la legitimidad napolitana de una receta que no habías probado antes. La perfección en elaboraciones sencillas (las más difíciles de conseguir) decantadas por la tradición y el tiempo. Esto es Luna Rossa. Sencillez y alma napolitana. La difícil sencillez de lo auténtico en algunas de sus elaboraciones más destacadas: las pizzas. Entre las mejores de Madrid. Local sencillo de una tradicional y popular trattoria. Pero que al entrar ves que todo es de verdad y está ahí desde hace casi 30 años. Ambiente de clientes habituales.

Especialidades: La autenticidad es la esencia de unas pizzas con una masa abuñolada, realmente buena, que se revela en la más básica, la Marinara. La más clásica y básica: salsa de tomate, ajo y orégano. Pizza luna rosa: tomate, mozzarella, rúcula, virutas de parmigiano, salsa de tomate. Pizza Calzone frita frutti di mare: rellena de ricotta, calamares y tomatitos cherry. Una especialidad estupenda poco conocida. De entrada, buñuelos de puntillas de calamares, camarones, rúcula y albahaca. Agradable duetto de mozzarellas fresca y ahumada con verduras a la plancha. Una muy buena pasta muy al dente, aderezada en frío y en crudo: spaghetti alla crudaiola, con tomates frescos, ajo, albahaca, orégano y parmigiano. También risotto con carabineros e ‘nduja (sobrasada). Spaghetti vongole (con almejas). De postre, tartas de requesón con naranja escarchada; y de almendra y chocolate blanco. Semifrío de vainilla, amarena y avellana. Mejores pizzas Madrid.

Comentario: 5 mejores restaurantes Ópera. El mejor mediterráneo gastro de la mano de algunos de los mejores especialistas en su género (4-22). Se definen como un “chiringuito chic urbano“ y queda muy fresco y disruptivo como concepto, pero es una bonita metáfora muy alejada de la realidad. El nivel de sus instalaciones y sus importantes socios así lo certifican: Rafa Zafra (Estimar, la marisquería más creativa); Luís Rodríguez (Casa Elías, una de las mejores arrocerías españolas); Carlos Bosch (El Portal y Manero en Alicante y Madrid), éste último, uno de los bares más cosmopolitas y sofisticados de la capital. Él es el ideólogo de este proyecto. Ubicado en la plaza de Ópera, en uno de los últimos hoteles 5*, Ocean Drive, sus instalaciones son chic, urbanitas, frescas e informales. De entrada, una barra en el hall, abierta todo el día, para tomar un cóctel o un refresco con música y Dj. Sobre todo, en la sobremesa y tardeo. En su interior, una barra expositor separadora de la cocina abierta. Mesas de restaurante y un jardín interior admirable. Mesas y sillas de diseño completan un ambiente moderno y minimalista.

Especialidades: La carta es un sumatorio de las cartas de los 3 socios, por tanto, este podía ser “el pedido”: 1) Tapas y aperitivos: magnífica tabla de semisalazones mediterráneos con sus espléndidas huevas de mújol. La tortilla de patata poco cuajada está rica. El brillante brioche de lobster roll de cangrejo real y bogavante. Si los mariscos fueran su camino: gambas rojas de Rosas de espectacular tamaño, dulces y únicas. Almejas de Carril de gran tamaño y sabor, abiertas a la brasa (también las preparan en sartén). También quisquilla de Santa Pola y langostino de Sanlúcar. Frituras limpias, bien ejecutadas, sin grasa ni rebozo sólido, como la estupenda raya adobada y frita al estilo Sanlúcar. Agradables los fritos de cangrejo real en gabardina. 2) Pescados la brasa: rodaballos, lubinas, escórporas, calamares… y en carnes: chuletitas de conejo y chuletón de frisona. 3) Si prefiere uno de los míticos arroces de Casa Elías, el de conejo y caracoles... espérese a que lo mejoren. No es realmente bueno. Los arroces no son los mismos que en Chinorlet, están hechos con gas y no con sarmientos. Son de capa fina, pero no están sueltos ni tienen socarrat. También hay arroz de verduras. De postre, tarta fina de manzana, bien producida, y la torrija de brioche con helado de vainilla estupenda. Muy buena bodega con gran listado de vinos por copas. Bastantes vinos de la zona levantina y varios con etiqueta Manero. 5 mejores restaurantes Ópera.

Comentario: Restaurantes gallegos Barrio Salamanca. Inaugurado en 1997 y reformado en 2015 en La Guindalera, la zona menos comercial del Barrio de Salamanca. Con el tiempo se ha convertido en un clásico de esta zona del barrio. Un lugar donde la gente acude a diario a verse con los amigos, comer su menú del día y “celebrar el finde” en la barra o en la mesa. Decoración contemporánea, atractiva y urbana: cerámica en paredes, patios ajardinados y una buena iluminación y separación de volúmenes mediante grandes cristaleras. En lo gastronómico, algún cóctel, picoteo en la barra, platos clásicos gallegos y otros de diversa procedencia. Me cuentan que, para la guía de viajes más popular del mundo (T.A.), desde hace 5 años, es el restaurante más valorado por sus comensales. No deja de ser curiosa la "doble narrativa" del mercado, el contraste entre la opinión de los especialistas de la prensa y guías gastronómicas "oficiales" y la opinión de la gente normal. Es lógico que difieran los criterio de los especialistas y del consumidor convencional. Pero cuando reiteradamente es el más destacado de esta ciudad, en un mercado tan competitivo como Madrid... algo deben hacer bien.

Especialidades: En la cocina, José Espasandín, cocinero y propietario, utiliza sartenes y cazuelas para hacer recetas gallegas tradicionales y otras de diferentes procedencias con algún chispazo de globalización. Empanada gallega de sardinillas y pasas. Buena la cecina de wagyu español. Correctas almejas a la marinera y otro tanto las sardina ahumada con tartar de aguacate y tomate cherry. Cremosa ensaladilla con huevas de mujol. Sopa de pescado y marisco. Buñuelos de bacalao con alioli de ajo asado. Croquetas de cecina y queso san simón y pulpo a feira. Rodaballo con ajada gallega. Entrecot de lomo de vacuno, no muy sabroso, pero bien madurado y tierno. Torrija con helado de galleta y tarta de queso gallego con confitura casera, fruta de la pasión y mango. Restaurantes gallegos Barrio Salamanca.

Comentario: Los 5 mejores restaurantes fuera de Madrid. Daniel Ochoa es un magnífico cocinero que han obtenido diversos premios y reconocimientos profesionales. Ha trabajado en grandes restaurantes, pero siempre en entornos rurales: su estilo de vida: Las Rejas (M. de la Osa); Julio Reoyo en Segovia, Echaurren, Casa Irene... entre otros. Un proyecto pensado y acoplado a su manera de vivir, para conciliar su vida laboral con la personal. En 2021 se les incendió el restaurante y lo han abierto de nuevo en una calle muy próxima. Han ganado mucho en tamaño y atractivo, y quizás también en un mayor espaldarazo a su proyecto. Posee una terraza invernadero acristalada, cerrada, con dos grandes higueras que salvan los cristales. Estética eco, madera e idealizada rusticidad en mobiliario. Cocina a la vista. En el plato, el compromiso de "vivir en el campo” y ofrecer lo mejor de la naturaleza de la Comunidad de Madrid. Ellos mismos van cada día al campo, a recolectar lo que éste ofrece (su propio nombre es toda una declaración Montia fontana: coruja, beruja o pamplina). También a buscar pequeños artesanos de la sierra madrileña: productos  de granjas ecológicas, hortelanos próximos, panaderos rurales, queseros artesanos, carnes de la sierra. Carta de vinos reducida pero bien seleccionada entorno a vinos naturales, que no gustan a todo el mundo, pero que ofrecen por consistencia con el proyecto. Incluso ellos mismos elaboran su propio vino. Servicio magnífico con el objetivo de agradara: los cocineros presentan sus platos y su compromiso. Reservar, los fines de semana siempre completos. Dos turnos.

Especialidades: Por tanto, cocina de mercado, de kilómetro cero, concretada en dos menús que cambian cada día, en función de lo que recogen o cultivan. Cocina de la abuela, recetas de la memoria pero con con detalles rupturistas, de alta cocina y puestas en plato atractivas. Menú degustado. Aperitivos refinados: buñuelo de cangrejo de río; escabeche de lengua y orégano; salpicón de caracol, albahaca y vermut. El primero el mejor. Trucha marinada, jugo de berza, manzana y rábano, calabacín encurtido y hierbaluisa: muy bien armonizada la naturaleza en el plato. Frescura y fragancia de la ostra del Monte Abantos. Níscalo, algas y mantequilla de salvia y calabaza: rica, rupturista y sorprendente unión de ingredientes. Suculenta la yema perfecta con demi-glace de champiñón y huevas de trucha ahumadas. Desconocidas pero finas las judías de Peguerinos con caldo verde de cocido, anisados y molleja a la brasa: rico guiso y molleja pasada de brasa. Espléndido conejo al ajillo: rodeado de setas de campo y salsa profunda con brillante acabado. Correcto cruasán de paloma. Jarrete de ciervo guisado en garnacha, su lomo y chalotas: caza que caza y atrapa por intensidad de sabores y excelente punto de la carne. Callos con librillo frito, sorprendente y novedoso con buen resultado. Más callos, los de toda la vida, como siempre, de los mejores. Postres, quizás no tan brillante como lo anterior. Buena pera ahumada caramelizada con helado de queso Jaramera y pie azul confitado. Pan de centeno y cerveza, correcto. Rico helado de remolacha y frutos de otoño. Inesperada torrija de boletus, creativa y seductora. En definitiva, una cocina contemporánea, refinada, basada en los fundamentos de la cocina tradicional y sus guisotes, pero con una mirada elevada y llena de técnica y sensibilidad. Los 5 mejores restaurantes fuera de Madrid.

Comentario: Mejores restaurante de tapas Retiro. Inaugurado en octubre de 2021, el espíritu de su propuesta está más cercano a la barra de una taberna, que a un restaurante. Por sencilla e informal: variada oferta de tapas y raciones para comer sentado. Por informal: barra pequeñita que forma parte de la cocina con un par de mesas altas camino al comedor. Terraza exterior bajo los soportales de la plaza y aunque está cerrada, necesita un clima amigable para comer en ella. El autor de todo esto, Willy Moya, cocinero reconocido y experto, que decidió reeditar el proyecto que tuvo en Sevilla con el mismo nombre. Interesante listado de vinos, también en buenos generosos de Jerez.

Especialidades: Hay que empezar por la rica y creativa gilda: boquerón, atún ahumado, pulpo y piparra convertida en un velo espléndido que la cubre totalmente. Ensaladilla con carpaccio de pulpo y pimentón correcta. Agradables croquetas de pollo asado. Buenos mejillones tigres (poco clásicos) con salsa piripiri y panko; se repiten por sabor y chispa. Espeto de lubina con fideuá ibérica y alioli de albahaca, un buen plato, estupendo en sabor y armonía. También cabrito cuscús, almendras, pera y curry. Y una buena carta de vinos, con algunos buenos vinos del marco de Jerez. Suelen preparar a diario guisotes fuera de carta. Entre ellos un cocido-ramen cuyo caldo hacen durante toda una semana. De postre: cremoso de chocolate, torrija confitada con naranja amarga y helado. Queen d ́amand con manzana y helado. Mejores restaurante de tapas Retiro.

Comentario: Novedades restaurantes Barrio de Las Letras. Joaquín Felipe, viejo conocido y reconocido de la gastronomía madrileña, vuelve a un restaurante de hotel y puede ser un buen presagio para él. Estuvo 12 años en el restaurante del 5 estrellas Urban, referente de los hoteles con restaurantes de gran nivel.Es un cocinero de larga trayectoria (El Chaflán, Europa Decó H. Urban, Aspen, Florida Retiro, Dogma / Grupo Pradal y otros), con solidez profesional, gran instinto cocinero y capacidad para bordar platos de atún, cerdo ibérico y sus leves encurtidos. Algunos se preguntan por qué cambia tanto de empleo… pues los aciertos y desaciertos de la misma vida. Sorprende la quietud y silencio en el jardín del restaurante, un patio interior en en medio de la ciudad, en el que no se oye ni una mosca, salvo cuando algún pajarillo llega a sus árboles. Comedor funcional y cómodo, “arreglado pero informal”, para sentirse a gusto y relajado. Hoy el restaurante todavía está en una situación de cierta transitoriedad propia de la Covid… un poco como “escondido o secreto”. Lo creó durante el confinamiento en este hotel de la Familia Palacios (del rioja), que abrirá el 1 de julio. De momento se accede al restaurante a través del hotel, solo con reserva. Tiene un menú del día y otro de fin de semana, que cambia con el mercado.

Especialidades: Cocina tradicional contemporánea, con buenos productos de mercado y temporada. Platos sencillos bien acabados, sabores de toda la vida, buscando la sencillez y relevancia del producto. Cocina de fuego lento y el mejor tratamiento para llegar a la esencia de producto. Ensalada de tomate, encurtidos caseros, vegetales de temporada y octavillo de anchoas. Naturalidad, equilibrio de ingredientes con los sutiles encurtidos aportando el brillo. Canelón con salsa pepitoria sabroso y rico. Salmonete de roca asado con mojo y papas, buen punto y rico producto de un plato canarión que rezuma autenticidad. Filete de oveja machorra, que no descubrí ante el reto del cocinero. Una carne hecha, tierna y sabrosa, que no acerté a descubrir. No sabía a borra. La machorra era una oveja que se mataba en las fiestas de las familias y los pueblos. De postre, tarta sabrosona y densa de queso payoyo. Carta de vinos corta, pero bien seleccionada. En el menú ofrece vinos de la D.O Madrid. Para pasar el largo trago de La Covid, creó con éxito un proyecto de comida a domicilio: Montar el Pollo (91 108 06 61). Pollos marinados durante horas, envasados al vacío y acabados con cocción controlada para conseguir la jugosidad deseada. Novedades restaurantes Barrio de Las Letras.

Comentario: Nuevo restaurante ibicenco en Madrid. Ibicenco por naturaleza, ha puesto casa en la zona del Retiro, por aquello de ampliar negocio y triunfar en la capital. Cocina contemporánea, agradable, con buen punto y algunos chispazos creativos. Más fusión (mexicana sobretodo) y receta personal, que autenticidad ibicenca en el plato, aunque hay platos y productos de esta tierra. Espacio moderno, confortable y con buen ambiente. A la entrada barra con forma de “L” y sofá corrido con mesas frente a ella. Comedor cómodo al fondo con cocina a la vista y patio interior con destacada vegetación de adorno. Atractivos y originales emplatados, con algunos “platos” o soportes algo rebuscados.

Especialidades: Un plato interesante para un picoteo inicial es el bodegón payés: embutidos de la isla confeccionados con porc negre; queso de cabra y paté de conejo con hierbas. Este último muy rico. Quesadilla de gambas con achiote, mozzarella y guacamole, todos ellos bien avenidos en un bocado muy agradable. Gamba ibicenca sobre papada de porc negre, espectacular por sabor, armonía y conjunción de texturas y suavidades de ambas. Gamba roja ibicenca sobre taco de lechuga con salsa de chipotle, unido y delicado. Correctas las croquetas caseras de conejo; las empanadas argentinas de sofrito de payés (plato típico) y la ensaladilla con atún fresco. También churros de yuca rellenos de sobrasada; finos y sabrosos. Bocata de calamares, en realidad un perrito caliente con ingredientes, presentación, texturas y características propias del “hot dog”. Plato original y divertido, símbolo de la casa, bien concebido y hecho, con pan casero al vapor, mayonesa de lima, katsuobushi y kimchi como aderezo. De postre, torrija ibicenca con queso de cabra, helado de higos y almendras. Correcto servicio y correcta carta de vinos, con algunos ibicencos... por aquello de que donde fueres haz lo que bebieres. Nuevo restaurante ibicenco en Madrid.

Comentario: Mejores restaurantes chinos Madrid. Hay restaurantes y cocineros que forman parte de la historia de la gastronomía madrileña. Liang Wang fue el cocinero del famoso restaurante chino del parquin de Plaza de España. Un local por el que pasó medio Madrid (un par de generaciones), y puede que “media España”. Curiosamente, este restaurante donde hoy cocina Liang Wang, se ubica en el mismo local en que se inauguró en 1963 el primer restaurante chino en Madrid, en una calle “asiática” por excelencia.

Especialidades: Por tanto, sabemos bien las cualidades que arrastra su cocina durante toda su historia: casera, tradicional, genuina, bien hecha, variada y con algunas destacadas especialidades, como los variados dimsum que forman parte de su nombre. Destaca el dimsum triangular de fécula de patata relleno de carne… especie de empanadillas rellenas de carnes de cerdo o vacuno, gambas y verduras cocidas al vapor. Las costillitas de cerdo, es otro de sus platos destacados, el pollo o la ternera salteadas con verduras, tallarines, casquería y pato laqueado correcto. En resumen, estamos ante un restaurante sencillo y popular, con cola de espera permanente en la puerta. No reservan. Su éxito: comida correcta, raciones abundantes y platos que se tarifan a precios muy baratos. Mejores restaurantes chinos Madrid.

Comentario: El nuevo Streetxo de ECI Serrano. El Corte Inglés sigue consolidando sus foods hall, otros lo hicieron internacionalmente antes con buenos resultados, Harrods el más significativo. Hoy en el remodelado edificio de Serrano han repetido la oferta anterior, junto con la nueva antojería mexicana de Roberto Ruiz, Can Chan Chan, (antes Cascabel). Un concepto de negocio muy consolidado: informalidad sin reglas establecidas, rupturismo, cocineros disfrazados de locos y presentando los platos a los clientes… ajetreo, voces de comandas, humo, enormes llamas en parrilla y wok… ritmo, órdenes voceadas, música alta... y todo ello en una gran barra rectangular y colorista, con la cocina en su interior y taburetes altos cómodos para comer. Terraza con mesa y otra barra de coctelería a la entrada, para tomar un trago mientras esperas a que te sienten. Si su vida es incompatible con la música a todo volumen, evítese la experiencia. No es para ir con niños pequeños.

Especialidades: Street Good. De callejero podría tener el ambiente creado en la cocina, que es su eje central. Muñoz ata productos, aromas y sabores de manera personal y única. Muy pocos cocineros son capaces de manejar su paleta de sabores y aromas en un mismo plato. Siempre despierta los sentidos, provoca diversión con sus juegos de sabores, texturas y temperaturas. Siempre innovación, nuevas creaciones o exploraciones y multiplicidad de aromas y sabores, por fusión, ruptura, despensa o tratamiento global de producto local. Siempre divertido. Mantiene algunos clásicos como el rico dumpling pekinés con la sobresaliente oreja confitada y hoisin de fresas; el suculento ssam de panceta ibérica; el agradable sándwich club al vapor. Aunque hemos perdido el sensacional chili crab, dicho sea de paso. Lasaña koreana de vaca con tomates escabechados y shiitakes. Las croquetas de la Pedroche, muy finas y poco sabor para no tapar "el sombrero" de atún. El curry japonés de carrillera de vaca melosa con arroz crujiente; las vieiras asadas con gazpacho de jalapeños, ambos dos buenos platos. Y de postre el brioche Pedroche con mantequilla y crema de vainilla… crujiente, esponjoso y rico, de impecable ejecución. Está más cerca de un desayuno que de un postre. Una experiencia diferente y atractiva. Dónde cenar en domingo Madrid. El nuevo Streetxo de ECI Serrano.

Comentario: Nuevo restaurante argentino en Madrid. Hubo una época que en Madrid se inauguraban restaurantes argentinos, con cierta regularidad. Poco a poco fueron extinguiéndose, por cosas de las modas… como también sucedió con los asadores vascos. Hoy el péndulo está al otro lado y las carnes a la brasa son protagonistas, incluso en muchos restaurantes no especializados. Quizás esta es la razón por la que este conocido restaurante Marbellí, con más de 25 años de existencia en Puerto Banús, ha decidido a instalarse en Madrid, con sus diferentes cortes de carnes argentinas, importados directamente por la propiedad. Lógicamente, también su carta está repleta de los platos tradicionales de los asadores aquel país. Además la carta también tiene otros platos de gastronomía internacional y algún pescado para los no “carnívos”.

Especialidades:Los comedores tienen diferentes ambientes y decoraciones distintas. A la entrada mesas altas y una pequeña barra, para picotear platos específicos y medias raciones de su carta. También un comedor integrado en la zona de la parrilla y con ella a la vista; otra sala más formal y elegante y un reservado. La empanada de carne es magnífica y no debería perdérsela. Lo mejor de la carta. Destaca su perfecta masa bien cocida y el relleno carne cortada a cuchillo muy bien guisado. Buena provoleta con tomatitos y pesto. Rico chorizo criollo, con buen aderezo y perfecto punto de brasa. Morcilla correcta con su piel crujiente que demuestra su buen asado. Mollejas agradables, siempre un placer de los asadores, aunque en este caso, un punto demasiado hecha. La chuleta de lomo alto de angus argentino, interesante y característica con el sabor de las reses argentinas. Muy bien asada perfecta de punto, con los 3 colores tostado, rosado y rojo. De postre flan de huevo y panqueques rellenos de dulce de leche… inevitable para los golosos. Carta de vinos sencilla con media docena de vinos argentinos y servicio muy atento y cálido, con ganas de agradar. Nuevo restaurante argentino Los jueves a las 21:30 h. amenizan la cena con el tradicional espectáculo de baile del rioplatense tango. Por cierto… nacido allá en el S. XVIII! Nuevo restaurante argentino en Madrid.

Comentario: Alejado del centro de Majadahonda, lleva desde el 2008 congregando fieles y llenando el restaurante con vecinos de las urbanizaciones cercanas y algunos más allá…3 de la capital. Fue el primer “toque”, responsable absoluto de los hermanos que vinieron después: Estoque y Tocata. La cocina es la responsable de su cotización y la que le ha convertido en uno de los fijos de la zona. Terraza tranquila ubicada junto al aparcamiento de la urbanización. Siempre llena en cuanto hace la temperatura adecuada para un café, un vino, o comer en la zona protegida y habilitada como comedor. Decoración convencional y sencilla en la barra y confortable en el comedor.

Especialidades: Lucas Vega Baena es el responsable del éxito de esta casa. Producto de temporada bien tratado, buena técnica, honestidad, regularidad en las ejecuciones y algunos chispazos globales o “viajeros”. Una carta corta, mejor… que quien poco abarca mucho aprieta. Muy adecuada para compartir un picoteo a modo de menú degustación. Todo está rico: las flores de alcachofas confitadas; el tartar de tomate con anchoa; las cremosas croquetas de jamón ibérico; los deliciosos y tentadores langostinos en tempura con mayonesa picante y algas japonesas. Estupenda focaccia de atún con papada y anchoa. Calamares fritos al estilo Santander, muy bien fritos y nada grasientos. Buen steak tartare de solomillo de vaca, cortado a cuchillo, con sabor y bien aderezado. Como complemento, tienen guarniciones de: patatas fritas, puré de patatas y verduras salteadas. De postre, tarta (muy) cremosa de queso, tarta de leche golosaza: un bizcocho empapado en 3 tipos de leche, en el que la condensada muestra su personalidad. También tarta fina de manzana, un postre clásico que está desapareciendo de las cartas. Carta de vinos correcta, servicio muy diligente y profesional. Te lo pasas muy bien. Se vuelve. Los mejores restaurantes de Majadahonda

Comentario: Restaurantes japoneses tradicionales Madrid. El primer restaurante japonés de Madrid (¿de España?), que no tiene pescado crudo en su carta. El primero especializado solo en yakitoris, cuyo fundamento es el pollo. De corral en este caso, su ingrediente fetiche. En definitiva, brochetas a la brasa no solo de pollo, wagyu, cerdo ibérico y casquería. Jugosas, doradas por fuera y poco hechas por dentro, esa es la esencia. Hiroshi Kobayashi, atraído por los buenos vinos españoles, llega de Japón hace más de 25 años. Es uno de los grandes sumilleres y jefes de sala japoneses. Hoy ejerce su magisterio en su propio proyecto (2017), después de haber crecido en El Chaflán, Asiana, Asiana Next Door y Miyama que dirigió varios años. Junto a su socio Masahito Okazoe (Restaurante Izariya), decidieron abrir un restaurante japo tradicional, diferente y enseñar a los españoles las comidas más comunes, que no son el pescado crudo, que lo consumen solo de vez en cuando.

Especialidades: Local de grandes cristaleras y espartana decoración japo. Larga barra de madera en forma de ele, con parrilla en su interior; lámparas de papel japonesas y estanterías con inscripciones de los platos. Confortable y buen ambiente. En buen tiempo tienen una terraza sencilla, tranquila y sin ruidos, dentro de la plaza. Servicio profesional y cercano. De aperitivo, vainas de soja tierna: edamame. Ensalada de cebolla fina con parmesano tomates cherry y katsuobushi; fresca, ligera, que se come con gusto. Pollo namban, frito al estilo japonés, con salsa aurora. Correcta cucharita de vieira con raíces de wasabi y arroz. Interesante, por novedosa, lengua de vaca a la parrilla con toque de sésamo. Algo “resistente al diente”, de textura no acostumbrada por estos pagos. Shitake a la parrilla con salsa ponzu y katsuobushi por encima estupendo y atractivo. Cerdo ibérico a la brasa con salsa picante: suave, graso, sabroso. Yakitori de wagyu tajima: japonés, graso, muy tierno y rico. Picadillo de pollo tsukune y yema de huevo a baja temperatura. El mejor plato, un albondigón realmente delicioso por sabor, punto y ¡la yema tratada para untar! También, pollo al curri seco estilo de mi madre: aromático, intenso, con chispa, acompañado de arroz blanco. De postre tarta de queso y flan de té verde. Carta de vinos más que interesante (60), sobre todo en tintos, con vinos españoles y del mundo. El sake es otra de las buenas posibilidades de esta carta y si le gustase, sería la alternativa auténtica para acompañar esta comida. Restaurantes japoneses tradicionales Madrid.

Comentario: Restaurantes en Barrio Salamanca. Proyecto personal de un joven cocinero, para buscar su lugar en la restauración madrileña tras diversas experiencias de nivel. Alex Marugán trabajó la cocina peruana nikkei de Luis Arévalo y la peruana global de Omar Malpartida, como cocinero jefe del Barra M. De la minúscula cocina, sale una carta corta con platos solventes y atractivos. Propuestas sencillas, naturales, de mercado, con sabor y personalidad guisandera. Los mimbres decorativos: escasos medios e inversión, una muy pequeña cocina y un comedorcillo sobrio de 3 mesas, a la altura de la cocina. Pero gracias al hall del mercado, los clientes disfrutan de más espacio y el comedorcillo a veces ni se ocupa. En cualquier caso, todas estas cosas a los aficionados de verdad a las cosas del comer, les importa poco. Lo importante es lo del plato y quizás cuánto cuesta. Y estos dos ingredientes tienen aquí una relación conveniente. Además, comer hoy en un mercado es una experiencia novedosa y algunos clientes, habrán entrado a uno pocas veces en su vida.

Especialidades: De aperitivo, magnífica cecina muy infiltrada de grasa y buenos tomates raf. Correctos espárragos verdes y blancos con crema de guisantes. Muy agradable la caballa con gazpacho verde, “picante a lo lejos”. Rosexat de raya con sobrasada: correcta, original y con buen punto. Este es uno de los fijos a comer, otros son los tacos, consecuencia de su experiencia pasada en México. Sobresaliente el de costilla, buen guiso, buen sabor. Otro de los fijos: callos, con pata y morro (¡no el aburrido estómago tan madrileño!), estupendos y melosos. Por poner un pero a los que comimos, algo de sabor a pimentón crudo. Muy buenas tartas: fina y cremosa la de queso, de las buenas. Y de chocolate, de liviano mousse refinado y sabroso. Por lo visto las tartas son a cargo de la “suegra” del cocinero, seguro que con receta de su novia: Clara Master Chef, comunity manager del restaurante. Ambiente joven y relajado. Buena selección de vinos en una carta cortita, como la del restaurante, pero buena. Restaurantes en Barrio Salamanca.

Comentario: Novedades restaurantes Legazpi Madrid. El ayuntamiento de Madrid a este nuevo distrito de Matadero lo ha llamado Barrio de los Metales, sus calles tienen sus nombres y están llenas de modernos y atractivos edificios. Una de estas calles, está colmada de ofertas de restauración, incluido este restaurante (abril 24) de grandes cristaleras, cálido ambiente y confortable espacio. Una amplia sala de mesas bajas con una pequeña barra para un cóctel y un aperitivo de informal. Un proyecto singular y poco común, con dos posicionamientos, con dos tipos de cocina: uno caribeño y otro español. Dirigiendo los fogones, un profesional con 10 años de experiencia acumulada y en el comedor, su mujer, Brenda que dirige la sala con cálido tino profesional.

Especialidades: Su carta determina los dos caminos mencionados: español y caribeño. A ellos les funciona, porque a los clientes les apetece comenzar con un plato con ritmos caribeños y acabar con otros mirando al mediterráneo. Con estos mimbres, lo que nos apetecía era viajar al otro lado del océano y probar sus sugerencias caribeñas. No obstante, comenzamos por una estupenda y cremosa croqueta de jamón, a la que le sobra la visera de jamón serrano, que obstruye el sabor de la fina bechamel y no la complementa. Atractivo aperitivo de excelente yuca frita con humus. Correcto cebiche de pulpo, con agradable y equilibrada acidez de la leche de tigre. Magnífico patacón con carne deshilachada de cochinita pibil y guacamole, de lo mejor. Ricos mofonguitos de langostinos, agradables y bien ejecutados. Sorprendente y finos los dados de bacalao en tempura de chipirón, muy rico. Volandeira con salsa de kimchi falta de chispa. Gyoza agradable que se deja comer. También hay solomillo y chuletona para los carnívoros y otros muchos platos. Bodega sencilla y corta propia de los comienzos. De postre un rico y crocante flan de coco con jengibre tropical Novedades restaurantes Legazpi Madrid.

Comentario: Nuevos restaurantes Barrio de Salamanca. Pasión es palabra que apasiona al mundo gastro. “Todos” la incorporan a su producto o servicio. Ahora también repiten barra y varra, con el riesgo de enredar, sobre todo en Internet. Hay 3 Barra / Varra Finas en Madrid y en España seguro que más de una docena. También son ganas… Con uve, es la marca global de una taberna contemporánea, con dos pisos: arriba restaurante formal con media docena de mesas vestidas y sofá corrido; y abajo mesas informales y barra de picoteo. Arriba lo gastronómico, lo formal con platos más elaborados, servicio muy bueno y ambiente excelente, en ambos pisos. El fundamento: dos cocineros con gran experiencia acumulada deciden poner casa propia: Jorge Velasco, 10 años con Ramón Freixa de director gastronómico. Serrano, en Efímero se dio a conocer, pero también estuvo en Kabuki, El Celler de Can Roca, Dani García. Elaboran cocina tradicional contemporánea con buenos acabados, cuidadas cocciones y ejecuciones en su punto con una ejecución personal.

Especialidades: Arriba buenas elaboraciones de ricas verduras: alcachofa confitada con sopa de foie y ventresca de salmón. Sabroso puerro a la brasa con salsa meunière trufada. Reinterpretación de sopa de cebolla, con idiazábal ahumado, caldo cremoso de cebollas tostadas y trufa negra, excelente. Buena tortilla de patata con cebolla y buen punto de acabado, como las cremosas y potentes croquetas de jamón. Fina tosta de gamba roja de Palamós aliñada con jengibre, lemongrass y mantequilla francesa salada, (una holandesa muy rica). Menestra de verduras a la parrilla. Estupenda ensaladilla con zanahoria, bonito y piparras. Oreja de cerdo brava, a baja temperatura, tostada y con piparras. Picanha (tapilla para los amigos) sobre brioche hojaldrado con yema curada, que estaba estupenda. De postre, encostrado de chocolate; flan cremoso y cacao. Bodega de 150 vinos (en construcción) ya muy bien dotada de marcas y vinos diferentes. Larga lista de vinos por copas, ¡del marco de Jerez 15. También 30 de champagnes. Nuevos restaurantes Barrio de Salamanca.

Comentario: 5 mejores novedades restaurantes. Xeito es toda una reafirmación de identidad, de ADN. Su creador, Iván Domínguez, aprendió de Marcelo Tejedor, Casa Marcelo en Santiago. Pasó al grupo Alborada, Alabaster y Arallo Taberna, donde desarrolló su personalidad culinaria y capacidad creativa. Tras dejar este Grupo, creó su propio restaurante en A Coruña y en el 2021 lo ha traído a Madrid, donde ya fueron reconocidas sus fortalezas profesionales. Local rupturista donde estuvo La Kitchen. Una característica bodega abovedada de ladrillo visto, un audaz y rupturista diseño con la cocina nada más abrir la puerta sin nombre. Por ella que hay que pasar para sentarse en una larga mesa comunal modulable por tramos corredizos. Cuando en la cocina hay plancha con grasa, se ahúma el local y a los de dentro. Restaurante con personalidad e ideas propias. No tiene una carta clónica, muy al contrario, todo es diferente, hasta su propio pan hecho por ellos: esponjoso, sabroso, de corteza crujiente que no puedes dejar de comer.

Especialidades: Los platos cambian con el mercado, pero la personalidad, ideas y tratamientos permanecen y demuestran un profundo conocimiento del mar. Capacidad creativa, trabaja con una paleta de ingredientes muy variada, hay intuición y riesgo para unir lo que no estuvo junto. Para crear uniones que dan lugar a un discurso nuevo que viene creando tendencia: la sencillez (supuesta), los mínimos tratamientos para la revelación máxima del sabor puro, la síntesis esencia del producto. Ya en el plato: mínimos, precisos adobos y aderezos para que pescados y mariscos conserven su alma atlántica. Como el minimalismo de los excelentes boquerones y pescados de descarte. Delicioso bogavante en 3 pasos: pureza de sabor, textura de la cola de tersa resistencia y compacto mordiente y la cabeza resumida en unos bocados que te acompañan a la eternidad del sabor. Vieira de Ferrol madurada con puré de apionabo y caldo gallego; un nuevo sabor a Galicia de su concha. Fabas de Lourenzá “sin almejas”, buena idea pero las fabas no dan la talla, son ollejudas y poco finas. El guiso de alubias casi hace honor a su nombre, muy justito de sabor y falto de personalidad y valores. Rubio plancha con pilpil, encurtidos de aceituna y tirabeques, poco hecho, sabor intacto. Correctas islas flotantes de postre. Gran listado de vinos con una excelente selección de tipos y procedencias. 5 mejores novedades restaurantes.